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Un jardín para ser feliz

El CORO, compuesto de tres varones y tres mujercitas, a ambos lados del escenario. Tendrán timbres de voces bien diferenciados y además de su maquillaje adecuado podrán usar máscaras que se quitarán y podrán conforme vayan diciendo sus respectivos parlamentos. El vestuario usado, sujeto a discreción del Director. Las máscaras pueden representar diversos tipos de personas mayores.


Por Octavio Robleto

PERSONAJES:

CORO: Tres varoncitos y tres mujercitas

NIÑO

NIÑA

El CORO, compuesto de tres varones y tres mujercitas, a ambos lados del escenario. Tendrán timbres de voces bien diferenciados y además de su maquillaje adecuado podrán usar máscaras que se quitarán y podrán conforme vayan diciendo sus respectivos parlamentos. El vestuario usado, sujeto a discreción del Director. Las máscaras pueden representar diversos tipos de personas mayores.

El CORO puede ser más numeroso, a juicio del Director, agregando, por ejemplo, dos ranas, un sapo, cuatro abejitas, una garza, dos niños tocando flauta dulce, tres viejos, pueden ser dos viejas y un viejo, dos hormigas.

Este CORO puede aprovecharse en un montaje vivaz y lleno de colorido, donde todos estos personajes se encuentren con los niños en un parque de diversiones. Puede haber dentro del parque trapecio y escaleritas para el ejercicio de los niños. Igualmente puede explotarse el efecto de niños saltando y jugando a la pelota. La flauta dulce entra en combinación con efectos de pajaritos y el baile de la garza. Estos personajes son mudos, pero puede agregárseles el texto que desee el Director, siempre de acuerdo con el montaje.

OTRAS INDICACIONES

La comedia se inicia en un jardín. Música ambiental de guitarra. La iluminación va creciendo poco a poco; luces a colores enfocando diferentes ángulos.

Al abrir el telón, una voz grabada puede decir: UN JARDÍN PARA SER FELIZ. En ese momento comienza la acción tirando una cuerda para saltar de extremo a extremo del escenario. Niños y niñas de los que andan jugando en el parque entran a saltar en la cuerda cantando una copla que selecciona el Director. Puede ser este corto poema de la selección infantil de Gabriela Mistral:

Dame la mano y danzaremos

Dame la mano y me amarás

Como una espiga ondularemos

Como una espiga y nada más

El mis verso cantaremos

Al mismo paso bailarás

Como una sola flor seremos

Como una flor y nada más

Te llamas Rosa y yo Esperanza

Pero tu nombre olvidarás

Porque seremos una danza

En la colina y nada más

 

La música aplicada a estos versos puede ser creada por el mismo elenco o por el Director. Las ranas y demás personajes llenan la función de espectacularidad para los niños. Los trajes deben ser llamativos. Las mariposas deben desplazarse con música de vals y pasos de ballet. La garza con música de ballet tocado por la flauta dulce.

En el caso del buey se puede usar una técnica impresionista y armarlo en escena. Al compás de una música que calce con la de gordo y lento, el buey va entrando en escena, armado por dos actores, uno adelante de pie, y otro más agachado. Los niños colocan una tela pintada con manchas, que parezca cuero. Luego le ponen la cola y por último los cuernos.

 

Las abejitas se desplazan con vestidos corrientes de niñas; pero al entrar en acción van tomando cada una un par de alitas hechas de un material fosforescentes. E invadiendo todo el espacio escénico con agilidad volátil. En este momento de las abejitas puede aplicarse la música de La Abaje de Schubert, un fragmento. Los tres niños de flauta dulce pueden ir vestido de duendecillos.

Al quedar iluminado totalmente el escenario, el CORO ya estará colocado en su sitio. Entran el NIÑO y la NIÑA y empiezan a curiosear el ambiente que les rodea. Primero observan las flores, después el supuesto volar de una abeja. Luego se agachan y levantan una piedra; mientras observan detenidamente, habla el CORO, asustándolos, ellos escuchan con atención.

CORO

La hormiga se fatiga

Con su carga amarga

El zompopo

Poco a poco

Con su tenaza altanera

Recorre su carretera

La abejita

Bien bonita

Con su vestido pulido

Pasa y pasa

Por la puerta de su casa

Y en sus patitas limpias

Y bien llenas

Lleva miel a sus colmenas

También el buey

Gordo y lento

—de sol a sol y de sal a sal—

Gana su sustento

Y hasta el tractor

Con su motor

Tor tor tor tor

Es un robot

Que no descansa

Con su gran panza

NIÑO: Pero las chicharras todo el día cantan.

NIÑA: Y las ranitas en la noche sólo dicen túngala, túngala, túngala.

NIÑO: Y el gato de mi casa todo el día duerme

NIÑA: Y los gatitos de mi gatita todo el día juegan.

CORO:

Son haraganes

Son holgazanes

Sólo bostezan

Su gran pereza

Son como Teresa

A quien su madre dice:

“Poné la mesa”

Y ella responde:

“No mamá tengo pereza”.

NIÑA: Pero mi muñeca puede cocinar y lavar y planchar y va al mercado y todo lo hace en la casa.

NIÑO: Y mi trencito trabaja todo el día.

NIÑA: Y yo puedo jugar con mi muñeca.

NIÑO: Y cuando ya no manejo mi trencito entonces juego con mi pelota.

CORO:

¡Qué carajo!

De arriba a abajo

Todo es trabajo

Para comprar gasolina

Tu padre tiene que ir a la oficina

Para la pana del mercado

El pobre viejo va afanado

Para tu comida fina

Tu madre vive en la cocina

Y para tus vestidos bonitos

Mamá tiene sus ahorritos.

 

NIÑO:

Yo como soy inteligente

Cuando sea grande seré Presidente

Así sólo mandaré

Y no trabajaré.

NIÑA:

Yo seré mujer casada

Y así no haré nada.

CORO: ¡Cómo bandiditos!

¡Zanganitos!

¿De dónde salen tales pensamientos?

¿Qué son esos atrevimientos?

Ahora mismo les pongo un castigo

No comerán pan

Tu muñeca no tendrá galleta

Tu soldado no tendrá helado

El CORO persigue a los NIÑOS, que corren por todos lados con gran algarabía. No logra coger a ninguno pero les va diciendo:

CORO: ¡Vengan, vengan, vengan granujitas, les daré una apaleadita!

Los niños logran esconderse en el jardín simulando y allí en secreto tienen el siguiente diálogo:

NIÑO:

En este jardín

a la comedia pondremos fin

 

 

NIÑA:

 

Buena idea

para que no sea una cosa fea

 

 

NIÑO:

 

Yo me haré pajarito

chiquito

para volar y cantar

 

 

NIÑA:

 

 

Yo me haré mariposa

¡Volaré de rosa en rosa!

A los niños le crecen alas, ensayan un ballet con figuras de vuelo y hacen mutis agitando sus alitas. Música adecuada.


La Prensa Literaria

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