En solo tres segundos, a una velocidad de 120 kilómetros por hora, un automóvil recorre 100 metros, lo que mide un campo de futbol. Y a 50 kilómetros por hora, avanza 13.8 metros por segundo. En un cálculo conservador, marcar un número de teléfono mientras se conduce toma al menos seis segundos; más que suficiente para que ocurra un accidente. Cada segundo cuenta. Póngale mente a las distracciones.
Hay tres tipos de distracciones al conducir, según se cita en Cars, sitio web especializado en autos. La distracción visual, que consiste en apartar la vista del camino; la manual, que lleva a sacar las manos del volante, y la cognitiva, que ocurre cuando la mente está concentrada en cualquier cosa, menos en lo que se está haciendo.
Entre las distracciones más comunes, el diario ABC menciona: usar el celular, las preocupaciones personales, el estrés y atender las necesidades de los niños mientras se conduce.
“El riesgo de accidente aumenta entre dos y cinco veces si el conductor utiliza el teléfono” y el peligro existe esté o no conectado el aparato a un dispositivo manos libres. Esto según un estudio del Centro Tecnológico Allianz, citado por ABC.
Se estima que uno de cada diez accidentes es causado por una distracción. Y la mayoría de ellas ocurren dentro del automóvil, como recibir una llamada, mirar el GPS, cambiar un CD, encender un cigarrillo, tomar un café, comer un bocadillo o tener una conversación intensa con un acompañante.
Acá le presentamos una tabla de relación entre distracción, velocidad y distancia recorrida, elaborada por la Fundación RACC, de España. Sin embargo, tenga en cuenta que en la práctica estos tiempos pueden triplicarse… y el peligro también. Piense en qué otras actividades le distraen al manejar y saque cuentas. Recuerde que un segundo de distracción puede significar una vida de arrepentimiento.
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