¿Cómo nació el amor por la fotografía?
Todo surgió de una forma natural. Desde pequeña siempre me llamó la atención, pero fue a la edad de 36 años que conocí una escuela de fotografía y me enamoré aún más de este arte. Me gusta la fotografía porque te expresas y puedes contar historias. Expresas tu interior como persona sin necesidad de ponerle título. La idea de plasmar una historia a través de una imagen me encanta.
¿Qué actitudes cree que le han ayudado a lo largo de su carrera como fotógrafa?
La sensibilidad, porque un fotógrafo tiene que ser sensible ante toda situación que se le presente, también debe entender la luz para saberla utilizar a su favor. También me ha ayudado mis ganas de seguir estudiando porque siento que voy creciendo como profesional. La fotografía es una carrera de toda una vida, no debe ser del todo empírica, siempre se tiene que estudiar.
¿Cómo es Claudia como mamá?
Soy una persona sencilla. Mis hijos ya están grandes y son muy líderes de sus actividades y su tiempo, pero siempre estamos compartiendo nuestras alegrías. Aún vivimos juntos y el tiempo que pasamos reunidos lo disfrutamos mucho.
¿En sus tiempos libres a dónde le gusta viajar?
A una montaña para estar en contacto con la naturaleza. Me gusta ir a las comunidades que se encuentran cerca de las montañas porque sé que todos los días puedo encontrarme con personas diferentes que realizan diversas actividades, y nada mejor que capturar esos momentos cotidianos con mi cámara, ya que salen de manera espontánea. Soy una fotógrafa minimalista. Me gusta que una foto sea de lo más simple, entre menos mejor.
¿Cómo se visualiza dentro de cinco años?
Me gustaría explorar la parte de la docencia. Quisiera impartir clases a los niños porque considero que ellos tienen un talento que es necesario desarrollar. Por otro lado, espero poder seguir intercambiando ideas y conocimientos con otras personas que están en el mundo de la fotografía.
¿Qué le aconsejaría a quienes apenas están incursionando en el mundo de la fotografía?
Que aprendan a observar de manera diferente y que se empapen en la creatividad, solo así encontrarán su propio estilo. Uno puede hacer una buena foto desde un celular o una cámara que no sea completamente profesional, pero si no se tiene desarrollado el ojo fotográfico no obtendrán una buena foto. Además, es importante que estudien, lean y no se limiten.
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