Aunque el hábito de fumar está en declive en Estados Unidos y otras naciones desarrolladas, en otros países presenta una ascendente trayectoria destructiva según la doctora Judith Mackay, asesora principal de la Fundación Mundial del Pulmón y la Iniciativa Bloomberg para reducir el consumo de tabaco.
“Habrá un mayor número de fumadores en los próximos 10 años, porque la población mundial va creciendo. Eso se traduce a más problemas de salud, enfermedades, discapacidades y muerte”, señaló Mackay en el contexto de la conferencia internacional sobre el impacto del tabaco.
Mackay dijo que “estaremos pasando de cinco a ocho millones de muertes en los próximos veinte años y muchos países no tendrán la capacidad de afrontar esa realidad en términos de atención hospitalaria porque esto nos conlleva a una fuerte consecuencia económica por la pobreza y el desarrollo de los países víctimas del tabaco y sus consecuencias”.
Ver en la versión impresa las páginas: 5 B