La crisis que enfrenta hoy la familia llama a la sociedad a que con urgencia se trabaje por los valores y principios morales de forma integral, asegura el reverendo Rafael Arista, presidente de las Asambleas de Dios de Nicaragua.
“No puede ver familia sin amor, sin respeto, sin solidaridad y sin fe. Si esos valores fallan en el núcleo de la familia, estamos ante una familia vulnerable que va camino al fracaso”, asegura el guía espiritual.
A juicio de Arista, la crisis actual de las familias, deben alertar a las instituciones religiosas, educativas y de gobierno a la búsqueda del fortalecimiento de los valores en la familia porque eso garantiza sociedades sanas y fuertes.
“El mundo está en crisis. Vemos por ejemplo en Europa, el veinte por ciento de los hijos mata a sus padres. En Nicaragua existe un alto grado de rebeldía de los hijos en contra de sus padres. Eso es muy preocupante y nos debe preocupar y actuar”, reflexiona el pastor.
El reverendo Rafael Arista, insiste que los valores como el amor, el respeto, la solidaridad y la fe son prácticas que en la familia garantizan una convivencia social sana.
IDEOLOGÍAS PERVERSAS
Por otro lado, el reverendo Arista, alertó que muchas ideologías de género tratan de destruir a la familia, al considerar que destruyendo a la familia, también destruyen a la sociedad.
“La familia es el motor más importante de la vida social y si ese núcleo está débil, pues débil está la sociedad; por eso que hay ideologías que tratan de destruir a la familia porque al destruir a la familia también destruyen a la sociedad y una familia desintegrada, es una sociedad desintegrada”, alertó Arista.
No obstante, sostiene que “cuando las familias son fuertes, las sociedades son fuertes y esa es la tarea de la Iglesia, de las instituciones educativas, de los gobiernos, buscar como fortalecer a la familia para que tengamos sociedades fuertes en valores, en educación, en fe y principios morales”, exhortó el reverendo Rafael Arista.
LA FE
Para el pastor Rafael Arista, la práctica de la fe es determinante en la sana conducción de la familia.
“La educación debe partir en casa con los padres. Luego la educación en la escuela y la universidad. Pero la fe es determinante para que nuestros hijos, nuestras familias sean sanas”, comentó el pastor.
“La urgente necesidad que tiene la familia hoy se debe declarar como un estado de emergencia. Los padres de familia debemos ser ejemplo y testimonio para que tengamos hijos con valores y principios morales”, exhortó Arista.
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