Una comisión que estudie la cuestión del diaconado de las mujeres y aclare los motivos por los cuales no se les permite a las consagradas la homilía de la misa. Son dos de los muchos temas delicados a los que respondió el papa Francisco durante el encuentro con la Unión de Superioras Mayores (UISG), la mañana del jueves 12 de mayo en el Aula Pablo VI.
En el largo diálogo, el papa invitó a las consagradas a evitar los riesgos del “feminismo” y de la “servidumbre” en la Iglesia en lugar del “servicio”.
Hace mucho tiempo que el magisterio de los papas celebra el “genio femenino” en la Iglesia. Y el genio femenino pide al papa de contar más.
Varias preguntas subdivididas en cuatro bloques, concretas, directas, al estilo de Francisco, sobre cuestiones que las consagradas del mundo advierten como urgentes, y para las cuales piden respuestas claras. Las religiosas también piden al papa la posibilidad de pronunciar la homilía durante la misa