El papa Francisco ha mostrado su preocupación por los problemas sociales que se están viviendo en América en general. Le preocupan las elecciones en Estados Unidos por la falta de una atención más viva a la situación social de los más pobres y excluidos. Le preocupan los conflictos sociales, económicos y políticos de Venezuela, Brasil, Bolivia y Argentina.
De pronto se puede estar pasando a un “golpe de estado blanco” en algunos países. Le preocupan las carencias del pueblo haitiano y la falta de diálogo de las autoridades de los países que comparten la isla, Haití y República Dominicana, a fin de encontrar una solución legal a los migrantes y desplazados.
Le preocupa la manera de entender lo que es un estado laico y el papel de la libertad religiosa por parte de algunas autoridades mexicanas.
El papa se entusiasma cuando comienza a hablar de la Patria Grande que es América Latina y de los esfuerzos que no deben cesar para lograr la integración de los pueblos.