La noticia de que la farmacéutica estadounidense Pfizer y la firma alemana BioNTech están más cerca de conseguir una vacuna contra la Covid-19, al referir que los estudios de la suya han mostrado una eficacia superior al 90% en los participantes sin evidencias previas de infección, alegra a los costarricenses.
Costa Rica tiene un acuerdo desde el 1 de octubre con Pfizer y BioNTech para el suministro de tres millones de dosis de vacunas, para 1.5 millones de personas, debido a que esa vacuna requiere de dos dosis.
El presidente costarricense, Carlos Alvarado, celebró este lunes la noticia brindada por Pfizer y BioNTech en un comunicado.
“Celebro el avance de la vacuna de Pfizer y BioNTech contra la COVID-19 al presentar un 90% de protección contra el virus. Gracias al acuerdo firmado con Pfizer y BioNTech, en 2021 recibiremos vacunas para 1.5 millones de personas”, dijo el presidente costarricense.
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Pese a los resultados satisfactorios de esa vacuna, ambas compañías advirtieron que la eficacia final podría variar a medida que avance el estudio.
Basándose en proyecciones, ambas empresas afirmaron que prevén suministrar 50 millones de dosis en el mundo en 2020 y hasta 1,300 millones en 2021, entre los que estarían 1.5 millones de costarricenses.
La fase tres del ensayo clínico de la nueva vacuna de Pfizer, BNT162b2, empezó a finales de julio y cuenta hasta la fecha con la participación de 43,538 pacientes.
Pfizer indicó que está reuniendo los datos de seguimiento durante los dos meses sucesivos a la segunda dosis, un requisito de la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos para autorizar su uso de emergencia, cosa que podría suceder en la tercera semana de noviembre.
El viceministro de Salud de Costa Rica, Pedro González, informó el pasado 1 de octubre, en conferencia de prensa, sobre el acuerdo alcanzado con Pfizer y BioNTech.
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Según el sitio web Delfino.cr, el contrato se suma a la incorporación formal de Costa Rica al mecanismo Covax, de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el cual también garantiza vacunas contra la Covid-19 para el equivalente del 20% de la población costarricense, es decir más de un millón de personas. Las compras por esta otra vía “se realizarán mediante el Fondo Nacional de Emergencias por la vía de excepción que permite la Ley 8488”, afirma el medio costarricense.
En cuanto al contrato con Pfizer y BioNTech, la entrega de las vacunas se realizaría de forma progresiva en el 2021, añadió.
Celebro el avance de la vacuna de Pfizer y BioNTech contra la COVID-19 al presentar un 90% de protección contra el virus. Gracias al acuerdo firmado con Pfizer y BioNTech, en 2021 recibiremos vacunas para 1,5 millones de personas.
Noticia esperanzadora para iniciar la semana.
— Carlos Alvarado Quesada (@CarlosAlvQ) November 9, 2020
De acuerdo con un artículo de La Nación, de Costa Rica, al recibir los grupos más vulnerables serían los primeros en recibir la vacuna, como el personal de salud, adultos mayores o personas con dos o más factores de riesgo.
Rusia también destaca su vacuna
A pocas horas de la noticia brindada por Pfizer y BioNTech, una representante del Ministerio de Salud de Rusia, afirmó que la vacuna rusa Sputnik V también tiene una eficacia superior al 90 por ciento.
“Somos responsables de supervisar la eficacia de la vacuna Sputnik V entre los ciudadanos que la han recibido como parte del programa de vacunación masiva. Basándonos en nuestras observaciones, (la eficacia) también es más del 90 por ciento. La aparición de otra vacuna eficaz es una buena noticia para todos”, indicó en un comunicado Oksana Drapkina, directora de un instituto de investigación dependiente del Ministerio de Salud, citada por el sitio web español El Economista.
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Esa vacuna fue la primera registrada contra el coronavirus el pasado 11 de agosto, sin embargo, generó preocupación en la comunidad científica internacional porque no había completado las fases que una vacuna debe tener.
En Nicaragua, al instante del anuncio del registro de esa vacuna, la vicepresidenta designada Rosario Murillo aseguró que el régimen mantenía comunicación con Rusia, no solo para obtener la vacuna, sino para empezar su fabricación desde la planta Mechnikov.