Marianela Lacayo
ASESORA DE IMAGEN
Una buena fragancia puede ser uno de tus sellos de identidad; sin embargo, no siempre resulta sencillo escoger el perfume adecuado.
Cuando vayás de compras, una de las claves para probar perfumes es no aplicarse más de tres fragancias al mismo tiempo. Utilizá mejor las tiritas de papel y luego de unos minutos escogé la que más te guste y vuelve a rociarla, esta vez sobre las muñecas.
Deben pasar unas horas para saber cómo acepta tu piel el perfume y cómo lo traduce. No es verdad que un perfume nos hace oler a todos igual pues cada quien, según su temperatura, tipo de piel e incluso sudor, hará propio este aroma.
Es importante saber diferenciar los diferentes tipos de fragancia. Por un lado están las aguas de colonia (eau de cologne), que tienen entre el 3 por ciento y el 6 por ciento de concentración de aroma, las aguas de baño (eau de toilette), entre el 7 por ciento y el 10 por ciento, las aguas de perfume (eau de perfume), entre un 10 por ciento y un 15 por ciento y el perfume, con una concentración de esencia aromática entre el 15 por ciento y el 40 por ciento.
Cada fragancia especifica si es de tipo tocador o perfume o si son de día o de noche. Esto permite aplicar la fragancia adecuada, según la actividad a la que nos dirigimos. En el medio laboral es más indicado utilizar colonias o perfumes muy suaves y para eventos por la noche, se puede llevar algo más fuerte.
Buscá entre olores florales, madera, cítricos, resina, canela, entre otros, el que más vaya con tu personalidad.
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