Tania Sirias
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“Primero la guerra fue frontal, ahora las tácticas para obstaculizar y boicotear la labor de los organismos no gubernamentales (ONG) son más sutiles”, afirmó la directora del Movimiento por Nicaragua (MpN), Violeta Granera, quien lamentó la presión que ejerce el Gobierno para provocar el cierre de estas instituciones democráticas.
Granera comentó que la estrategia que está utilizando el gobierno del presidente inconstitucional Daniel Ortega es evitar que los cooperantes, ya sean nacionales o internacionales, destinen recursos a los organismos, afectando así la elaboración de foros y otros eventos donde participan los miembros de la sociedad civil.
“Nosotros ganamos a nivel mundial la licitación para un proyecto con las Naciones Unidas. Nos enviaron un correo para felicitarnos y decirnos que habíamos obtenido los recursos. Luego alguien me llamó para advertirme que el Gobierno se había movilizado para evitar que nos dieran esos fondos”, narró Granera.
Azahálea Solís, miembro del Movimiento Autónomo de Mujeres (MAM), lamentó que las organizaciones feministas también son perseguidas por el gobierno de Daniel Ortega.Recordó que en 2008 el MAM fue allanado con la intención de obtener información sobre el quehacer de esta organización y quiénes cooperaban con esta.
“Es evidente la persecución del Gobierno, al punto que han cortado los vínculos estatales con las organizaciones de mujeres, al punto que se ha reducido el número de psicólogas, médicos y abogadas”, dijo Solís.
A los pocos días, ella recibió otro correo en el que le informaban que había sido una lamentable equivocación, lo que dejó en evidencia, según Granera, la presión gubernamental contra este organismo.
La directora del MpN agregó que los cooperantes que tradicionalmente han brindado apoyo a estas organizaciones están claros del peligro de la inestabilidad diplomática que tienen en Nicaragua, lo que ha incidido en la captación de recursos.
CPDH TAMBIÉN AFECTADA
Marcos Carmona, presidente de la Comisión Permanente de los Derechos Humanos (CPDH), comentó que tampoco este organismo se ha escapado “de la presión que ejerce el Gobierno contra las ONG”, ya que también “nos ha costado captar recursos”.
Expresó que en dos ocasiones han ganado proyectos con donantes, pero los cooperantes han sido presionados a través de la Cancillería de la República para que no se destinen fondos para este organismo.
“Esto lo hacen con el objetivo que la CPDH no ejecute ninguna actividad que tenga que ver con juventud y con temas de derechos de la mujer”, dijo Carmona.
El defensor de los derechos humanos dijo que el Gobierno pretende limitarlos en su acción, ya que no le convienen los señalamientos.
ONG SOMETIDAS
Granera lamentó que algunos organismos se han tenido que someter a los lineamientos del gobierno orteguista para poder obtener recursos.
Otras han cambiado sus estrategias, haciendo trabajos menos directos, con menos críticas al Gobierno, “pero nosotros preferimos seguir llamando al pan, pan y al vino, vino”, dijo Granera.
Aseguró estar clara de las complicaciones de este trabajo, ya que otra forma de presión del Gobierno es amenazar a sus familiares que trabajan en el Estado con perder sus plazas. Las organizaciones consultadas aseguraron que seguirán trabajando tengan o no recursos para hacerlo.
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