Se caracteriza por ser un alimento líquido, se prepara de diversas formas y de acuerdo a la forma de preparación y al contenido de ingredientes recibe distintos nombres: consomé, caldo, crema, sustancia, gazpacho.
Consomé
Es un caldo concentrado o como la palabra sugiere, consumido, elaborado con carnes, pollo o pescado. Se acostumbra servirlo caliente al comienzo de la comida, como entrada antes del plato fuerte.
“La sustancia” es un término popularmente utilizado para referirnos a un consomé, generalmente se ofrece como un alimento reconstituyente para enfermos convalecientes o para quienes necesitan mejorar su nutrición.
Crema
Es una sopa espesa hecha de una o varias verduras, se licua y se añade crema o leche. Todos los tipos de sopa mencionados hasta el momento se sirven calientes, combinados distintos con vegetales sin almidón y con verduras feculosas como papas, camote, plátano, quequisque, yuca, malanga o con otros alimentos fuentes de carbohidratos como arroz, fideos, cebada, avena o derivados del maíz como las albóndigas.
Puede o no llevar trozos de carne, pollo, gallina o pescado. Como es de suponer, las sopas con alimentos nutritivos, su contenido calórico depende de los ingredientes utilizados por lo que pueden emplearse en planes de alimentación tanto de reducción como de mantenimiento o ganancia de peso.
Gazpacho
Es también una sopa de vegetales, preferiblemente sin almidón (remolacha, pepino, zanahoria, cebolla, coliflor y otros), se sirve fría para refrescarnos en los meses de calor, se sazona con aceite de olivo, vinagre, limón o naranja agria y condimentos naturales y a veces se acompaña con pan integral.