Los nicaragüenses que huyen de la represión orteguista, desatada desde abril, han tenido que recurrir a la Iglesia Católica, afirmó monseñor Abelardo Mata Guevara, Obispo de la Diócesis de Estelí y secretario de la Conferencia Episcopal.
“Efectivamente, durante estos meses de angustia, hemos dado letras de certificación (constancias) de la dura situación en la que se encuentran muchos de nuestros conciudadanos que se han visto obligados a salir del país para salvaguardar su seguridad; particularmente jóvenes estudiantes”, sostuvo.
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El régimen de Daniel Ortega, luego de quitar a sangre y fuego los tranques con los cuales los ciudadanos se protegían de la represión policial y paramilitar, ha desatado una cacería contra los ciudadanos, quienes son calificados de vándalos, golpistas, terroristas y delincuentes por la pareja presidencial.
“Hemos tenido muchas trampas en este delicado servicio de humanidad, pero hemos instaurado los filtros necesarios para no incurrir en error, ni en daño de los mismos solicitantes de constancia”, señaló Mata.
Un gobierno inhumano
De acuerdo con el obispo Mata, miembro de la Conferencia Episcopal, mediadora y testigo en el diálogo nacional, suspendido desde el pasado 16 de junio, la huida de miles de nicaragüenses hacia el extranjero demuestra que el régimen Ortega-Murillo es inhumano.
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“¿Qué significado tiene esta égida? Lo que la cruda realidad nos está diciendo que estamos ante un gobierno inhumano que no le importa el bien de la Patria. No es bueno para el desarrollo de la nación la huida de tantos cerebros y de la gente en capacidad laboral sino el consolidarse en el poder, un poder que la mayoría de la gente no siente que va en la búsqueda del bien común”, afirmó el obispo Mata.
El religioso aseguró que el régimen solamente busca cómo consolidarse en el poder sin importar los costos humanos que esto represente. “Es todo lo contrario: el poder que ejerce un ejército de ocupación, el cual solo trata de defender sus fueros y sus “conquistas”, sin importar los cadáveres que se apilen para conseguir sus objetivos”, criticó el religioso. Desde abril pasado, más de 512 personas han muerto a consecuencia de la represión oficial.