¿Qué está pasando en Nicaragua?, fue la pregunta clave del conversatorio “Nicaragua tan violentamente dulce”, del sexto Festival literario Centroamérica Cuenta 2019 sobre el cual giraron temas como el caudillismo desde los años de la colonia hasta Daniel Ortega, libertad de expresión, la insurrección cívica de abril y el futuro inmediato de Nicaragua.
Realizado ayer , jueves 16 de mayo, en el Teatro de la Aduana “Alberto Cañas Escalante” en San José Costa Rica, fue conducido por el costarricense-nicaragüense Jaime Ordóñez, y tomaron la palabra la poeta Gioconda Belli, el escritor Sergio Ramírez y el periodista Carlos Fernando Chamorro.
Lea: Sergio Ramírez: “Mientras no existan condiciones, Centroamérica Cuenta habrá de vivir en el exilio”
Belli recordó que a partir del noventa cuando salió electa presidente Violeta Barrrios de Chamorro, el actual dictador Daniel Ortega insistió “gobernar desde abajo”, y valoró su conducta caudillista como parte de una “cultura política que ha divido el país”.
“Llámense timbucos, calandracas, liberales, conservadores, el no convivir con estas diferencias ha engendrado dictaduras” señaló Gioconda Belli, autora del libro “El país bajo mi piel: memorias de amor y de guerra”.
Caso excepcional, destacó la poeta fue el de la presidenta Barrios que logró “maternizar” o conciliar a sus oponentes. Para Bellí, Nicaragua, también “es un país de la dulzura”, llena de poetas, músicos y de amor a la vida.
Ortega: ¿Neosomocista?
Ante la pregunta de Jaime Ordóñez que si Ortega representa a un “neosomocismo”, el periodista Carlos Fernando Chamorro, recordó el síndrome de Pedrarias relacionado al autoritarismo, al que deben hacerle frente instituciones fuertes con un buen sistema de justicia que logren confrontar su poder.
Chamorro confesó que en un momento del mandato de Violeta Barrios, pensó que la Policía Nacional al despartidarizarse estaba curada del control político, no obstante Ortega regresó al poder y la sometió; algo parecido ha pasado con el ejército, pero sin llegar al extremo, sostuvo.
Por igual pensó que la libertad de expresión que heredó de su madre (Violeta Barrios) basada en la “tolerancia como política de Estado” era irreversible, pero que esta empezó a debilitarse con Arnoldo Alemán, y finalmente sucumbió con Ortega. Por lo que en el futuro en Nicaragua habría que reformar ambas instituciones, estimó.
Para Chamorro el desenlace de esta crisis “no va a ser fácilmente por las buenas, porque Daniel Ortega está aferrado al poder”.
Caudillos y falta de institucionalidad en Nicaragua
Ordoñez también preguntó a los panelistas sobre el caudillismo en la cultura política del nicaragüense y la existencia de una salida a la crisis iniciada el pasado 18 de abril del 2018.
Al respecto el escritor Sergio Ramírez, dijo que esta es posible solo a través de un sistema democrático verdadero. Y compartió la idea de Chamorro que el “mal del país es la falta de institucionalidad” de parte de los caudillos, como Zelaya y otros “mandamás”, que se han reelegido e impuesto por encima de la ley.
Lea además: “El sueño de la razón produce monstruos”: el regreso del mundo subterráneo de Goya al Madrid del siglo XXI
Por su lado Belli recordó que desde los años de la colonia surgieron los caudillos y que en Nicaragua nunca se consolidó una clase intelectual capaz de estar en el poder. Las invasiones norteamericanas tuvieron que ver, criticó. “Sandino sale de la invasión norteamericana de 1926”, observó la poeta.
“Y este monstruo que hemos creado de Daniel Ortega sigue a otro monstruo que es Somoza, es un poco desconcertante”, destacó Belli al contrastar la idiosincracia del nicaragüense como “muy vital, fiestera y no somos violentos”.
Régimen de Ortega es insostenible a mediano plazo
Al volver a tomar la palabra Chamorro se mostró optimista pero no se atrevió a realizar un pronóstico, pero precisó que “el régimen de Ortega es insostenible a mediano plazo”.
“Pero hay salida porque estamos frente a la agonía de un régimen”, añadió el director de Confidencial, un medio asediado, confiscado y clausurado por el régimen en diciembre del año pasado.
Para Chamorro la “insurrección cívica autoconvocada tiene ciudadanía”, porque la mitad del camino está recorrido y lo que falta son instituciones que contribuyan al cambio democrático.
Además observó que Ortega se mueve en alianza con Venezuela y Cuba y no va a ceder sin la presión internacional.
Por su lado Ramírez comentó que el 70 por ciento de la población en Nicaragua es joven y que antes del 18 de abril estaba “dormida”; pero salió a protestar contra régimen de Ortega después de los incendios de la reservas del Indio Maíz y por las reformas del seguro social.
Estas “fueron las mechas que encendieron la carga explosiva”, luego se sumaron los adultos, comentó el autor del libro testimonial “Adiós muchachos”.
Las mentiras “orwellianas” de Rosario Murillo
Otros de los temas abordados fue la campaña de mentiras orquestadas por el régimen.
Al respecto Belli se enfocó en el rol de las mujeres en el régimen Orteguista, que las hace aparecer en las estadísticas “tan bien como cualquier país escandinavo”.
“O sea Rosario Murillo se ha encargado de poner mujeres en la Asamblea y ministerios”, dice Belli y cita un reportaje donde la preguntaban a la gente y nadie conocía sus nombres, y eso indica que las “mujeres aparecen de una manera decorativa”, señala Belli.
“Pero una de las cosas más terribles que pasa en Nicaragua, a mi manera de ver, es el reino de las mentiras que han creado. Es orwelliano totalmente el montaje que se ha venido haciendo no desde abril, sino desde mucho antes: de que la revolución sigue, que la gente que está en contra es de derecha o que Ortega tiene el 64 por ciento de apoyo, y después se da abril”, dice Belli cuestionar la manipulación de su propaganda falsa.
(Al referirse al término “orwelliano “, la poeta alude al escritor y periodista británico George Orwell, autor de “1984”, novela distópica y claustrofóbica que fábula el totalitarismo y su “mundo ideal”.)
Lea: Madre amada: una nueva canción del tenor Mario Rocha a las madres de los mártires de abril
En contraparte a esta utopía “orwelliana” Belli destacó la lucha de las madres de abril y su lema de que “no haya perdón, ni olvido”, y de su petición que no se negocie con la idea de la amnistía.
Para la poeta ahora su esperanza que “suceda otra cosa” a como sucedió en abril, y que se empiecen a resquebrajar las bases del partido. El problema de ejército no lo ve claro, pero si cree que “hay una complicidad absoluta”, comentó.
Al final del conversatorio, tanto Belli como Ramírez, recordaron su amistad con el escritor argentino Julio Cortázar autor del libro “Nicaragua tan violentamente dulce”, nombre que ahora llevó su ponencia en el Centroamérica Cuenta, en su memoria.
Los escritores recordaron la estadía de Cortázar (también autor del celebrado libro”Rayuela”) en Solentiname (Nicaragua), y su paso por Costa Rica y Paris, ya casi al final de su vida.
“Julio Cortázar se murió muy temprano, en 1984, y no tuvo tiempo de ver la debacle que después significaría el fracaso de esté gran sueño revolucionario”, comentó Ramírez.
Me encuentro en San José, Costa Rica, invitado por el escritor y amigo @sergioramirezm para participar en #CentroaméricaCuenta que este año, debido al clima de incertidumbre provocado por la represión y la crisis sociopolítica no se pudo realizar en Nicaragua. pic.twitter.com/Oqt9tP3TgI
— Luis Enrique Mejia Godoy (@LEMG_Oficial) 16 de mayo de 2019
Festival clausura con un conversatorio de cuatro premios Alfaguara
Como su evento estelar de clausura, el Festival literario Centroamérica Cuenta anuncia un conversatorio de cuatro escritores ganadores en este año y anteriores del premio Alfaguara quienes revelarán sus experiencias sobre el premio, así sobre las novelas galardonadas, su legitimidad y actualidad.
Este viernes 17 de mayo, a partir de las 7:00 p.m., en el Anfiteatro Fidel Gamboa – CENAC (Centro Nacional de la Cultura.
Están presentes: el argentino Patricio Pron, autor de la novela “Mañana tendremos otros nombres” (Alfaguara 2019); los escritores españoles, Ray Loriga, autor de “Rendición (Alfaguara 2017), José Ovejero, de “La invención del amor” (Alfaguara 2013) y Sergio Ramírez, con “Margarita está linda la mar” (Alfaguara 1998), los que conversarán con la escritora mexicana Mayra González Olvera.
Después de este conversatorio y en este mismo local, los cantantes Luis Enrique Mejía Godoy, autor de varias canciones sobre las protestas de abril, y Luis Enrique Mejía López, mejor conocido como El Príncipe de la Salsa, de la canción Mordaza, también dedicada a la lucha, compartirán sus experiencias sobre sus canciones, libros publicados, poemas musicalizados y pinturas.