El director de la División de las Américas de Human Rights Watch (HRW), José Miguel Vivanco, calificó de “absurdas” las estadísticas oficiales de Venezuela sobre el Covid-19, aduciendo que es un país donde los médicos carecen de agua para lavarse las manos, pero los reportes de contagios son ínfimos en comparación con sus vecinos: Colombia reporta más de mil contagios diarios y Venezuela solo confirma 1,212 casos en todo el transcurso de mayo, contabilizados hasta este lunes 25.
“Las estadísticas que salen de Venezuela son absurdas. No es posible que en un país donde los médicos no tienen agua para lavarse las manos en los hospitales haya un poco más de 1.000 casos confirmados de Covid-19 y 10 muertes”, escribió Vivanco en su cuenta de Twitter.
Las estadísticas que salen de Venezuela son absurdas. No es posible que en un país donde los médicos no tienen agua para lavarse las manos en los hospitales haya un poco más de 1.000 casos confirmados de Covid-19 y 10 muertes.
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— José Miguel Vivanco (@JMVivancoHRW) May 26, 2020
Alerta propagación regional
Vivanco acompaña su publicación en Twitter con un video y un artículo de HRW, en el que alerta del riesgo de una propagación regional de la enfermedad, por la “absoluta falta de preparación del sistema de salud venezolano para la llegada de la pandemia de Covid-19”. Vivanco también expresa la urgencia de que “llegue suficiente ayuda humanitaria al pueblo venezolano”.
De esta manera Vivanco dejó sentada su desconfianza sobre los datos que ofrece el régimen de Nicolás Maduro sobre este país que lleva más de cinco años de crisis humanitaria: hambruna, desabastecimiento de productos básicos, inflación, falta de servicios básicos, inseguridad y violencia política.
“La cifra real es seguramente mucho mayor debido a la escasa disponibilidad de pruebas confiables, la total falta de transparencia y la persecución contra profesionales de la salud y periodistas que cuestionan la versión oficial. Como consecuencia del hacinamiento en zonas populares y cárceles, así como los problemas generalizados para acceder al agua en hospitales y hogares, es probable que el nuevo coronavirus se extienda con rapidez por el país. El éxodo masivo de venezolanos, así como la actual migración de venezolanos que ingresan y salen del país producto de la pandemia, agrava el riesgo de que el virus se extienda más allá de Venezuela”, advierte HRW en el artículo.
HRW insiste en que debido a la falta de acceso al agua, “los proveedores sanitarios no pueden lavarse las manos, lo cual es crucial para contener la propagación de la Covid-19”. Además señala que “la escasez de combustible hace más difícil que los profesionales de la salud y los pacientes se acerquen hasta los hospitales y centros de salud, y que los alimentos lleguen a quienes los necesitan”.
Estudio demuestra precariedad
HRW presenta una investigación realizada en noviembre y diciembre de 2019, en conjunto con los Centros de Johns Hopkins, en que hicieron “entrevistas telefónicas detalladas a profesionales de la salud en 14 hospitales públicos de Caracas, la capital del país, y cinco estados (Anzoátegui, Barinas, Bolívar, Lara y Zulia)”.
“Las conclusiones de la investigación, que se realizó en parte antes de la pandemia, demuestran que el sistema de salud venezolano es particularmente precario y no tiene las condiciones para lidiar con la Covid-19”.
“Los profesionales médicos y de enfermería entrevistados dijeron que prácticamente no hay jabón ni desinfectante en sus clínicas y hospitales. Con el aumento de la inflación y la devaluación de los salarios, cada vez les resulta más difícil llevar sus propios insumos, tales como jeringas o guantes. Es común que los cortes de agua afecten a los hospitales de Caracas. En algunos hospitales en zonas remotas, los cortes de agua han durado semanas e, incluso, meses. Los pacientes y el personal de la salud se ven obligados a llevar su propia agua para consumo, para lavarse las manos antes y después de procedimientos médicos, para limpiar insumos quirúrgicos y, a veces, para descargar los inodoros”.
Venezuela y Nicaragua, regímenes hermanos
En Nicaragua, el régimen de Daniel Ortega, aliado político de Nicolás Maduro, maneja con secretismo la información sobre el desarrollo del Covid-19 en Nicaragua y ofrece información confusa sobre la misma. El Minsa reporta 759 casos confirmados y 35 muertes hasta el 26 de mayo. Sin embargo, durante las últimas semanas, diariamente se reportan muertes por enfermedades respiratorias, neumonía atípica principalmente, que ya son un sinónimo de Covid-19 en Nicaragua.
El Observatorio Ciudadano Covid-19, una organización de médicos y civiles que lleva un conteo extraoficial de casos sospechosos de coronavirus, asegura que en Nicaragua hay un total de 2,323 casos.
En los hospitales donde diariamente mueren personas de enfermedades respiratorias, se les exige a los familiares que entierren a sus difuntos inmediatamente, lo que es otro indicio de que murieron por esta enfermedad altamente contagiosa, declarada pandemia por la Organización Mundial de la Salud (OMS) el 11 de marzo de 2020.
Hasta este lunes, los casos confirmados de Covid-19 superan los cinco millones en el mundo y las muertes asciende las 600 mil. Ya se han recuperado más de dos millones de personas en todo el mundo.
Nicaragua es el único país en la región que no tomó medidas para prevenir los contagios masivos de Covid-19. Los expertos nicaragüenses también ha advertido que la falta de medidas ante la pandemia del Covid-19 podría convertirse en una «situación de alto riesgo» para los países vecinos y podría aumentar la estigmatización social de los nicaragüenses.