El más reciente Estudio de Opinión sobre Nicaragua realizado por la encuestadora CID Gallup y hecho público este miércoles, refleja que el dictador Daniel Ortega y su esposa y vicepresidenta Rosario Murillo sepultaron su popularidad en 2018, cuando reprimieron las protestas civiles y que la opinión sobre ellos se mantiene negativa desde entonces.
La manera en que la dictadura ha manejado la crisis sanitaria del Covid-19 también le ha pasado factura. La pandemia “exacerba de nuevo el sentimiento negativo” contra Ortega, indica el informe de CID Gallup.
Otra revelación de la encuesta de mayo es el pesimismo de la población nicaragüense acerca del futuro del país.
El 71 por ciento de los encuestados considera que el país va por el camino equivocado, mientras solo el veinte por ciento considera que está en el camino correcto.
Ese nivel de pesimismo bajo los últimos 14 años de Ortega solo se ha visto en 2008, después del gran fraude electoral de las municipales y en 2019, después de la represión de la rebelión de abril.
Según la valoración del informe, el sentido de pesimismo es generalizado en todos los estratos demográficos y residencias de la población. La salvedad en esa ola de pesimismo son los seguidores de Ortega que expresan que el país va “muy bien, Ortega es un buen presidente, tenemos que comer”, entre otras expresiones.
Las opiniones contrarias, que son mayoritarias, estiman que ha “habido mal manejo de la economía”, “los tranques han traído solo desgracias”, “la economía muy mal”, Ortega “solo ayuda a los de su partido”.
No creen que resuelvan los problemas del país
La encuesta también revela que solo un 17 por ciento considera que es “muy probable” que Ortega y su gobierno resuelvan el principal problema del hogar. Otro 13 por ciento dice que es “probable”, pero un 66 por ciento considera que es “poco o nada probable” que este gobierno le ayude a resolver el principal problema del hogar.
Entre esos problema citaron el desempleo, el sistema precario de salud y el alto costo de los alimentos. El sesenta por ciento de los encuestados dice que la economía familiar está peor o mucho peor cuando la compara con el año pasado.
Desempeño, el 50 por ciento: “Mal o muy mal”
Ortega se ha logrado mantener en el poder por 14 años gracias a fraudes electorales, concentración de poder, manipulación de las leyes, represión armada contra los opositores, y pactos.
Esta encuesta de CID Gallup refleja que más de la mitad de los entrevistados opinó que Ortega desempeña “mal” (15 por ciento) o “muy mal” (35 por ciento) sus labores como presidente del país.
El estudio detalla que “los católicos, los más educados y los hombres tienen mayor probabilidad de opinar negativamente de la forma en que se desempeña el primer mandatario” de Nicaragua.
Solo una de cada tres personas encuestadas opinó “bien” o “muy bien” de las labores del mandatario nicaragüense.
Los sandinistas y los que tienen una opinión favorable de Ortega son quienes ofrecen una percepción positiva de su gestión.
Años buenos de Ortega
El período positivo de estas tres gestiones se ubica entre 2012 e inicios de 2018. Fue en esa época que se sintió el impacto de la cooperación venezolana que aunque no se transformaba en un ciento por ciento en apoyo a los nicaragüenses, sí hubo programas clientelistas que impulsó el orteguismo.
Datos de la encuesta
Para realizar esta última encuesta de CID Gallup fueron entrevistadas 1,828 personas, mayores de 16 años, en todo el territorio nacional. Las entrevistas telefónicas se realizaron entre el 15 de mayo y el 11 de junio del 2020. El nivel de confianza de la encuesta es de 95 por ciento y el margen de error es de 2.3 por ciento.