Violeta Granera, miembro del Consejo Político de la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB) y actual coordinadora rotativa durante noviembre en la Coalición Nacional (CN), manifestó que la propuesta que está debatiendo la plataforma opositora sobre la situación del Partido Liberal Constitucionalista (PLC), es que la representación nacional actual de esa organización política se separe del Comité Nacional de la CN, y que ese asiento sea ocupado por líderes locales del partido rojo.
Granera explicó que esto se haría para que el presidente en funciones del PLC, Miguel Rosales, dedique toda su atención y su tiempo a resolver el litigio interno con la representante legal del partido, la diputada María Haydeé Osuna, y a hacer realidad la Convención Nacional, como se lo propuso a ella en el pronunciamiento del viernes pasado.
“Para Miguel Rosales y los del PLC la propuesta nuestra ha sido que se separen para organizar esa convención y resolver todos esos problemas, solo la delegación nacional en el Comité Nacional, y perfectamente podrían seguir trabajando los líderes del PLC en los territorios y también en las comisiones de trabajo, al igual que los jóvenes del PLC. Esa ha sido nuestra propuesta y la estamos discutiendo”, dijo Granera el sábado.
La opositora agregó que el tema del PLC todavía no está decidido y lo van a seguir abordando en la CN hasta que haya un consenso entre los siete miembros de la plataforma.
Petición de Rosales a Arnoldo Alemán
Rosales, quien es el representante nacional del PLC ante CN, también le pidió en ese pronunciamiento al expresidente Arnoldo Alemán Lacayo, que deponga voluntariamente el cargo de presidente honorario del PLC, como respuesta a las presiones de los demás opositores, que le piden al partido rojo demostrar que son una organización democrática y para eso tienen que separarse del caudillismo de Alemán, quien arrastra un pasado de corrupción y pacto con el régimen de Daniel Ortega.
Lea También: ¿Sigue vivo el pacto Alemán-Ortega? Esto dicen los críticos y opositores
Granera dijo que reconoce como un paso positivo la intención de Rosales, pero considera insuficiente lo que se está haciendo. “Desde la Unidad Nacional nosotros sentimos que es insuficiente seguir intentándolo sin poder dar garantías de una solución”, dijo la opositora.
Aseguró que no quieren la expulsión del PLC y explicó que las conversaciones internas entre los miembros de la CN han girado entorno a “la forma en que el PLC debe resolver a lo inmediato los problemas de institucionalidad y democracia interna, para que no debiliten a la Coalición Nacional”.
“Nosotros no estamos en ningún momento hablando de expulsión del PLC, nosotros reconocemos todos los valiosos liderazgos que tiene el PLC como hay en todas las organizaciones de la Coalición Nacional.
Lea Además: El dilema de la Coalición Nacional. ¿Fue un error invitar al PLC al proceso de unidad?
LA PRENSA ha intentado conocer la posición de Rosales sobre la propuesta que explicó Granera, pero no ha contestado los mensajes solicitando hablar sobre el tema.
La crisis del PLC se intensificó la semana pasada por la designación de Estados Unidos a la esposa de Alemán y a sus tres hijos mayores, para que no sean elegibles para ingresar a ese país, como un castigo por los actos corruptos que cometió Arnodo Alemán en su gobierno.
El escrito explica que “si bien esta designación se basa en actos ocurridos durante su paso por la Presidencia, los actos corruptos de Alemán siguen afectando a Nicaragua hasta el día de hoy”.
Los críticos han valorado que esta acción de Estados Unidos es un mensaje a la cúpula arnoldista para que se aparte del PLC, un partido que se encuentra en este momento dentro un proceso de unidad opositora en la Coalición Nacional.