De los 39 detenidos en los últimos meses, dos hombres: Jaime Arellano y Noel Vidaurre, y dos mujeres: Cristiana Chamorro y María Fernanda Flores, se encuentran bajo arresto domiciliario. Sin embargo, defensores de derechos humanos han denunciado que su condición de incomunicación con sus abogados defensores y la manera en que están resguardados violenta las normas mínimas de las Naciones Unidas. Arellano y Vidaurre cumplen hoy 100 días de detención.
El comentarista Jaime Arellano y el precandidato presidencial Noel Vidaurre fueron citados por la Fiscalía la mañana del sábado 24 de julio. Ahora se encuentran bajo custodia policial en sus casas.
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La nota de la Policía detalla que ambos están siendo investigados «de conformidad con la Ley 1055», o Ley de Defensa de los Derechos del Pueblo a la Soberanía, la Independencia y Autodeterminación para la Paz.
Posteriormente la Fiscalía emitió un comunicado donde acusó a Arellano y al dirigente estudiantil Lesther Alemán por «presuntos autores del delito de conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional, de conformidad a los artículos 410 y 412 del Código Penal en perjuicio a la sociedad nicaragüense y el Estado de Nicaragua».
Por su parte Vidaurre fue acusado, según comunicado del Ministerio Público, junto con la abogada defensora de derechos humanos, María Oviedo y el líder campesino Pedro Mena por el mismo delito.
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Previo al arresto domiciliario, Vidaurre había sido interrogado en la Fiscalía. En ese momento dijo que a él no le habían dado ninguna explicación del requerimiento y que solamente le explicaron que la cita se debía a comentarios brindados a medios de comunicación.
«Yo no he hablado nunca de que hay que sancionar a Nicaragua ni cosa que se le parezca», dijo en ese momento Vidaurre. LA PRENSA ha buscado contactarse con familiares y el defensor del preso político, pero con resultados infructuosos.