
Magazine, 2 de julio del 2006
El poeta cazador de monjas
Las musas de este poeta no son las típicas mujeres angelicales que corretean desnudas por las praderas o que inspiran ternura con sus aires virginales y arpas doradas a orillas de los arroyos cristalinos de algún paraíso perdido. No, las musas del poeta Adán Silva usan hábitos, cuentan rosarios y alaban a Dios. De ahí nacen sus inspiraciones y sus tentaciones