
La mayoría de las víctimas sienten culpa y no denuncian por sentirse culpable, ya que muchas de las veces tomaron licor, según los expertos. Foto: Óscar Navarrete
La droga de la violación
Cada vez más nicaragüenses dicen haber sido violadas después de ser drogadas. El patrón casi siempre es el mismo: discotecas o bares, bebidas y luego despertar en la cama de un motel sin recordar nada de lo que ocurrió