
Los instructores del Ejército Popular Sandinista eran duros con los reclutas. "A ver, ¿sos florcita o sos hombre?", les preguntaban durante las distintas clases como las de tiro.
Mulukukú, paraíso o infierno
Carlos Mejía Godoy cantó a Mulukukú como el lugar «donde el agua corre libre» y la propaganda sandinista lo presentaba como «el paraíso de la juventud». Sin embargo, para los miles de jóvenes que llegaron, obligados los más y voluntarios los menos, la más famosa escuela de entrenamiento de reclutas fue un verdadero infierno