Una de las medidas de protección principales contra el Covid-19, es el uso de las mascarillas, y con el regreso a clases el uso de estas puede resultar molesto para niños y niñas, sin embargo al estar Nicaragua en la segunda ola del virus, es importante que los padres tomen medidas para asegurar que sus hijos e hijas utilicen este medio de protección, sin afectar su salud mental.
Según la Organización Mundial de la Salud, “el uso de mascarilla no debe ser obligatorio para los niños de hasta cinco años, en aras de la seguridad y el interés general del niño y dada su incapacidad de utilizar adecuadamente una mascarilla con una asistencia mínima”.
Sin embargo, en Nicaragua “no sabemos exactamente cómo se comporta la transmisión del virus, no tenemos suficiente información”, dice el licenciado Javier Barreto, psicólogo y miembro del Comité Científico Multidisciplinario, por lo tanto es mejor prevenir y enseñar a los niños y niñas a usar los medios de protección sin que resulten en una causa de ansiedad y miedo para los más pequeños.
Informar a los niños es importante para generar seguridad y confianza en ellos
El uso de las mascarillas puede generar problemas de rechazo, sentimientos de miedo, angustia, ansiedad y desconfianza en algunos niños y niñas, por eso, el licenciado Barreto, indica que se les debe explicar constantemente como usar adecuadamente las mascarillas y porque se usan, pues si se les obliga a utilizar sin explicación se corre el riesgo de que sientan y piensen que están en peligro.
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“Con la entrada a la escuela, los niños van a necesitar mucho más amor, mucho más apoyo, mucho más consuelo, que se les dé respuesta a las preguntas que puedan tener, y en todo caso hay que reafirmar un mensaje de seguridad y protección, que entiendan que esto es, y repito, para la protección de ellos, es para la protección de las personas que ellos quieren”, explicó Barreto.
Según, el licenciado Barreto, varios estudios dicen que el desarrollo de las capacidad de utilizar y reconocer expresiones emocionales se da a partir de los seis meses y un año de edad, y de los seis años a los 14 años se desarrollan habilidades de reconocimiento facial más en aspectos emocionales.
Sin duda esta parte del desarrollo se puede ver afectado por el uso de las mascarillas, pero al ser necesario su uso, el psicólogo hace algunas recomendaciones de actividades que se pueden hacer en el hogar para lograr que los niños tengan más seguridad, confianza y control al saber que detrás de estas mascarillas hay persona que los quieren y los cuidan.
“En el caso de los más chiquitos, menores de 6 años, se pueden incluso hacer como juegos, hay que quitarse y ponerse la mascarilla, que los niños entiendan que detrás de la mascarilla están personas que los quieren, están sus padres, esto se puede hacer en forma de juego en la casa, practicar ponerse la mascarilla y sacársela, usarla en la casa por diversión. Esto con la única intención de que los niños puedan identificar que no hay nada misterioso y nada de miedo detrás de esas mascarillas”, explicó el licenciado Barreto.
Otro aspecto importante que se debe recordar, es que el uso de la mascarilla también puede afectar la comunicación en los niños y niñas, incluso en los adolescentes, pues el uso de esta nos distancia de los demás al no poder ver sus expresiones faciales y esto también puede generar sentimientos negativos de angustia y fobia, “pero recordemos que hay que adaptarse a la situación, creo que aquí lo importante en el caso de los niños mayores, es que se les brinde toda la información de la importancia que tiene la utilización de la mascarilla”, agregó.
Por otro lado, también los adultos, padres y maestros, deben adoptar algunas medidas para transmitir esa seguridad y confianza que los niños y niñas necesitan.
“En la medida en que se pueda conseguir que los niños perciban que los adultos están en mayor calma, que están serenos, incluso que están de buen humor, esto le va a facilitar al niño, reducir los niveles de ansiedad de agobio y de no perder eso tan importante que es la comunicación visual”, dijo Barreto.
Además, dice que los maestros deben tomar en consideración algunos cambios en la metodología de dar clases, por ejemplo, una enseñanza más visual, usar el lenguaje corporal y gestual, hablar más despacio y con buena entonación.
“Lo esperanzador es que, en general, los niños tienen una gran capacidad de adaptación gracias a su plasticidad cerebral, sin dejar a un lado el apoyo y la sensación de seguridad que se les pueda brindar”, concluye Barreto.
Enseñanza y práctica de medidas de protección
Otro aspecto importante que se debe considerar con el regreso a la escuela, es que los padres deben asegurar que sus hijos e hijas conozcan las medidas de protección y que puedan cumplirlas mientras estén fuera de casa.
El doctor Leonel Argüello, epidemiólogo y también miembro del comité, señala que lo principal es que los padres estén conscientes de que Nicaragua enfrenta la segunda ola del Covid-19, y por lo tanto valorar los riesgos que en el país son más altos por la falta de información.
“Lo primero es poder uno realmente estar claro de cuál es el riesgo que existe en el país, que es alto, segundo, que nuestros niños no están inmunes, no tienen defensas para el virus y que si se enferman, pueden complicarse, aunque en un porcentaje muy bajo apenas el 1% fallece, pero pueden complicarse, lo peor en este caso son los daños y las secuelas que pueden quedar en el corazón a ese niño”, explicó el doctor Argüello.
Lo segundo es ver si se está educando con el ejemplo en casa, es decir que los padres deben mostrar a los niños que ellos toman las medidas de protección para que los niños repliquen las mismas dentro y fuera del hogar, además mantener la comunicación y “explicarles que es el virus y todo lo demás, y decirles que ellos deben de protegerse porque si no se protegen, se pueden enfermar o pueden traer el virus a la casa que puede afectar a los papá o a los abuelitos, sin crearle sentido de culpa, sino explicarles tranquilamente de forma natural que es lo que se está sucediendo y el riesgo que se corre”, explicó el epidemiólogo.
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Para garantizar la práctica adecuada de las medidas de prevención, el doctor Argüello sugiere mostrar y poner a los niños y niñas en diferentes situaciones mientras estén en el hogar, por ejemplo, después de enseñarle las forma correcta de poner y quitarse la mascarilla o de lavarse las manos, el adulto puede ponerse la mascarilla y consultar con el niños si está correctamente ubicada para que pequeño pueda corregirlo, o pueden lavarse las manos bajo la supervisión de los pequeños y de igual manera dejarse guiar por ellos para que sean monitores de las acciones de los adultos y a prendan tanto la forma correcta como la incorrecta de tomar las medidas.
También sugiere preparar un kit anti Covid-19 para que el niño o la niña pueda llevarlo a la escuela, en este debe tener tres mascarillas de tres capas y dos bolsas de plástico, una donde llevan las mascarillas limpias y una donde va a poner las mascarillas sucias.
“Ellos tienen que cambiarse la mascarilla por lo menos cada dos o tres horas y enseñarles además que la mascarilla no se puede tocar por delante, enseñarle como que se quita, como se pone, todo eso podés enseñarle perfectamente a los niños de cinco años para arriba, ellos aprenden perfectamente”, indica el doctor.
Se debe poner una botella, con agua extra, junto a un pedacito de jabón y una toallita de manos, en este caso, “le enseñas todas las técnicas de lavarse las manos por más de 40 segundos, frotándose las palmas, después entre los dedos, el torso, las yemas, las uñas, los dedos gordos y la muñeca, le enseñas todo eso y lo practicas con ellos” explicó Argüello.
Además, de ser posible se recomienda el uso de la careta facial, enseñar a los niños a medir la distancia de cuatro brazos de distancia y muy importante, utilizar señales de aprobación como el dedito gordo arriba cuando siguen las medidas correctamente.
“Ese es un entrenamiento que tenés que hacer, ahora, ese entrenamiento que vos haces en la casa, te va a dar más seguridad a vos como padre…Los maestros lo que deben hacer es fortalecer lo que están haciendo los padres”, explicó el doctor.
Por otro lado, los maestros, además de estar pendientes del cumplimiento de medidas, deben estar atentos y evitar el bullying y la estigmatización, ¿Por qué razón?, porque vos saben cómo son los chavalos, que si uno lleva la mascarilla de un dibujo y el otro se le burla”, agregó el Argüello.
Además recomienda siempre “el concepto es de los cinco más uno: primero el distanciamiento físico de al menos dos metros, segundo lugar, no tocarse ojos, nariz, ni boca, y eso hay que estarlo entrenando en la casa y también en el colegio, el tercero es que ya sabemos que todas las superficies están contaminadas, por lo tanto, yo tengo que lavarme las manos con agua y jabón por al menos 40 segundos, usando la técnica adecuada para lograr lavarnos todas las manos y las muñecas, la cuarta sería que si salís la mascarilla bien ajustada de tres capas, quinto, la careta facial, y (el más uno), la ventilación que es fundamental en la casa, las escuelas, recorridos escolares, centros de trabajo”, agregó el doctor Argüello.