Tres mujeres caracterizadas por defender derechos humanos y alzar su voz contra el régimen de Daniel Ortega cumplen hoy 290 días privadas de libertad en las celdas de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), conocidas como el nuevo Chipote. A Ana Margarita Vijil, Dora María Téllez y Suyén Barahona les acompaña el también líder de la Unión Democrática Renovadora (Unamos), Víctor Hugo Tinoco y hasta antes de su fallecimiento durante su privación de libertad, el general en retiro Hugo Torres.
A pesar de la demanda de mejorar las condiciones en las que se encuentran los presos políticos y el fallecimiento de Torres, el aislamiento para las mujeres de Unamos continúa y les siguen negando ver a sus hijos menores de edad.
Ana Margarita Vijil, Dora María Téllez, Hugo Torres (q.e.p.d.), Víctor Hugo Tinoco y Suyén Barahona fueron detenidos la noche del pasado 13 de junio, en un operativo policial que se caracterizó por la violencia, como denunciaron los familiares de estos privados de libertad. Fueron detenidos por estar bajo investigación, de conformidad con la Ley No. 1055, Ley de Defensa de los Derechos del Pueblo a la Independencia, la Soberanía y Autodeterminación para la Paz.
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Vijil fue sentenciada a diez años de cárcel, luego que el pasado 2 de febrero el juez Noveno de Distrito Penal de Juicios, Luden Martín Quiroz García, la declarara culpable de «conspiración para cometer menoscabo contra la integridad nacional».
Mientras a Téllez la condenaron a 8 años por el delito de «conspiración para cometer menoscabo contra la integridad nacional».
Tinoco fue sentenciado a 13 años por “menoscabo” y por el mismo delito Barahona fue condenada a 8 años.
Defensores de derechos humanos a nivel internacional han indicado que la “saña” contra los presos políticos es mayor contra las mujeres y los periodistas, denuncia que también realizan familiares de las presas políticas.
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«Ambas fueron secuestradas de sus propias casas de habitación el 12 y el 13 de junio, respectivamente, con el agravante que en la casa de Tamara estaba su hija de 5 años», relata Pinita Gurdián, madre de Ana Margarita Vijil y abuela de Tamara Dávila.