Se le atribuyen propiedades diversas
1. Las personas que padecen presión arterial alta no deben tomar café.
FALSO. Se trata de una afirmación que, en sentido estricto, carece de rigor. El café no tiene contraindicaciones formales respecto a la hipertensión arterial.
2. El café ayuda a los deportistas.
VERDADERO. El efecto de la cafeína sobre la actividad cardíaca y, por lo tanto, sobre la circulación, hace que llegue a los músculos una cantidad mayor de sangre oxigenada. Sin embargo, este efecto es breve.
3. La cafeína produce insomnio.
VERDADERO. Uno de los efectos más conocidos de la cafeína es su capacidad de actuar como estimulante, retrasando temporalmente el cansancio; efecto que puede causar insomnio en personas sensibles.
4. La cafeína crea adicción.
FALSO. Mucha gente dice “ser adicta” a la cafeína del mismo modo que puede serlo a las compras, al trabajo o a la televisión. Al cesar de forma brusca el consumo regular de cafeína, algunas personas pueden padecer dolores de cabeza, fatiga y somnolencia. Estos pueden prevenirse reduciendo el consumo de cafeína de forma gradual.
5. La cafeína aumenta el riesgo de sufrir enfermedades cardiacas.
FALSO. Numerosos estudios realizados a gran escala revelan que el consumo de cafeína no aumenta el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares. Es recomendable que las personas con la tensión alta consulten con su médico.
6. La cafeína provoca cáncer.
FALSO. Existen pruebas científicas de peso que demuestran que la cafeína no incrementa el riesgo de padecer cáncer; por el contrario, nuevas investigaciones revelan sus efectos positivos en la prevención del cáncer de colon.
7. El café combate el dolor de cabeza.
VERDADERO. La cafeína tiene un efecto vasoconstrictor, de ahí que pueda disminuir o aliviar la jaqueca. De hecho, algunos analgésicos contienen cafeína.
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