- La clave está en esforzarse en el trabajo y en la vida personal
Los jóvenes han cambiado su escala de valores y se han dado cuenta de que son más felices si disfrutan con su profesión.
Disfrutar del trabajo y llevarlo a cabo con responsabilidad es una de las mayores garantías de productividad profesional.
Sanaya Román y Duane Packer, autores del libro Creating Money (Creando Dinero), afirman que cuando uno hace lo que realmente le gusta el dinero y la abundancia fluyen libremente.
La riqueza que apuntan estos escritores beneficia sobre todo a los jóvenes que disfrutan con su trabajo y que tienen claro que esta faceta es una parte importante pero no única en su vida.
Ellos saben que divertirse con lo que hacen y llevarlo a cabo con responsabilidad es una garantía de productividad mucho mayor que la que puede alcanzar el ejecutivo agresivo que lo arriesga todo por ganar más dinero.
Esta propuesta es una alternativa a la práctica profesional actual que bien necesita un relevo por parte de estas nuevas fuerzas. Sin embargo, la ilusión de progresar en el trabajo no significa que todo vale para conseguir nuestros objetivos.
La capacidad de esfuerzo proyectada en este ambiente laboral se traduce luego y con la misma intensidad en la capacidad de disfrute en la vida personal de cada uno. Está bien llegar a ser un ídolo de la canción o del futbol o un gran ejecutivo y ganar mucho dinero pero si para eso hay que renunciar a la familia, al tiempo libre, etc., a lo mejor no compensa.
Mucho menos el de vivir de los montajes y las exclusivas que son pan para hoy y hambre para mañana, además de suponer el desprestigio social más absoluto.
La cultura del dinero fácil no ha dejado pasivos a los jóvenes tal y como están demostrando últimamente. Conocedores de cerca de lo que supone este estilo de vida, ya no quieren ser ni sus representantes ni mucho menos sus herederos.
No les importa tanto formar parte de un determinada generación, sea cual sea el atractivo nombre que lleve, como sacar adelante este proyecto y la manera de ver la vida.
Antes, los estudiantes de economía y empresariales querían ser como los grandes financieros de fortuna fácil y carrera más fulminante todavía. Sin embargo, poco a poco se han cansado de estos ejemplos y han optado por una vía más gratificante: la recuperación de aquellos valores que se han ido perdiendo por el camino y que ahora se revelan como más útiles y necesarios.
Fuente: www.mundobelleza.com