- Sus fotografías intervenidas son provocadoras, en ellas refleja con ironía lo que él ha considerado el Nuevo Güegüense, rompiendo así con la idea tradicional de lo que conocemos sobre el pícaro burlador y mentiroso
Mención especial en el concurso de pintura García Lorca, Bruselas. Exposiciones En 1980- Aula de Cultura de la Facultad de Medicina. Fotos de la marcha antinuclear. 1984- Ego. Espacio Zulunacion, Mojacar-Almeria. 1985- Tramas 1. Espacio cultural Canónigos-Segovia. 1986- Tramas 2. Galería Lafanega-Valladolid. 1987- Fragmentos urbanos. Galería Art sans flamme-Bruselas (Bxl). 1988- Fragmentos urbanos 2. Galería Maldoror-Bxl. 1989- Fragmentos urbanos 3. Galería Lafanega-Valladolid. 1991- Ciber Meninas 1. Art tournant-Bxl. 1992- Ciber Meninas 2. Galería H20-Bxl. 1995- Tatoo. Bienal de Arte Contemporáneo en Namur-Bxl. 2000- Lulas. Galería Las Meninas-Bxl. 2003- Mannequin. Galería Espacio Amalgama-Bxl. 2003-Chinchín y Milú en el Caribe. Galería Fusión Rose-Santo Domingo. Página Web: http://www.valverdestudio.net
Otras actividades
Taller de creación de las fiestas populares en los años 1977-80, así como de la revista Barrio.
La realización de un dragón en fibra de vidrio de 25 m de largo para las fiestas del Patrón de la ciudad de Valladolid.
Trabajos de restauración en el taller de Río Churugusco. México, D.F. 1981-2.
Múltiples colaboraciones dentro del ámbito del diseño gráfico: FASAB, Taller Las Meninas, La casa dominicana. Centro Gallego, Centro Cultural Federico García Lorca, Comisión Europea, Parlamento Europeo, en la creación visual y musical. Durante los años 1996-2003 realizó múltiples campañas de publicidad como diseñador gráfico. Entre otras, la presentación del Euro en España. Diferentes creaciones con técnicas audiovisuales.
José Valverde, es español. Vive en Nicaragua hace cuatro años, en su estadía ha expuesto dos muestras de fotografía artística, Travel Nica Way y New Güegüense, esta última polémica por los matices que le imprime, al presentar al Güegüense obras icono de la cultura nicaragüense con un concepto cuestionador y provocativo.
Un Güegüense que está bajo lupa, y cuyo foco lo hace aparecer como personaje consumidor, un militar que esconde, que se burla, pero a la vez una Suche Malinche que reacciona y pide: No más violación de los derechos de las mujeres, es la voz de Valverde, rebelde, cuestionadora de la obra declarada por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad.
Un nuevo Güegüense que busca reconocerse en una cultura diversa, más amplia, universal, moderna, es la nueva propuesta que se exhibe en Galería Códice el miércoles 4 de junio a las 7:00 p.m
¿Cómo surge el nuevo Güegüense?
La idea viene de superar esquemas trasnochados, posturas que no tienen que ver con la realidad. Tengo mi propia forma de ver a los güegüenses, no comparto la manera en que han sido vistos con esquemas machistas, sexistas y excluyentes.
Estamos en una sociedad de consumo y es así como se plantea el nuevo Güegüense, que tiene sus propios valores, necesidades, y también máscaras frente a un sistema globalizado, despiadado que te envuelve.
¿Qué valores reconoce en la nueva versión?
Otros valores que se plantean y que hay que retomar, no más violación de los derechos humanos de la mujer, en El Güegüense tradicional la mujer es un objeto sexual. En la obra estamos frente a una mujer sorda, ciega y muda, que no defiende sus derechos. Entonces, yo trato que estos valores sean positivos y que las mujeres no sean objetos, sino seres que protesten y reclamen no más violación a sus derechos, a sus necesidades de todos los días.
Ironizo con la sociedad de consumo y planteo a una sociedad que consume donde el plástico se convierte en dinero, como son las tarjetas de crédito. También hago énfasis en los deporte de masas como el beisbol, es decir nos venden esos valores y un deporte que nos atonta.
¿Cómo se lee que un Macho de la obra El Güegüense sea un activo consumidor de tarjeta de crédito?
El intercambio económico que está en El Güegüense tradicional, es la evasión de los impuestos y salirse por la tangente del cabildo. Ahora, este Güegüense está gobernado por un sistema moderno y económico que lo controla, que clona tarjetas de crédito, que quiere duplicarla, el comercio del dinero, el uso del plástico como algo moderno.
¿Su exposición está construida a base de símbolos como estatuas de guerrilleros con máscaras de El Güegüense o militares?
Sí, está la de un guerrillero, la estatua de Montoya, está una reiteración de imágenes de militares, como el que habla en la televisión. Soy un antimilitarista desde lo más profundo de mi ser, con el Nuevo Güegüense los militares no tiene cabida, no estoy de acuerdo con esas sociedades militarizadas que quieren hacer la guerra. Me parece que la Patria hay que defenderla con la democracia, con la palabra y no con armas.
Estas imágenes de los militares pueden tener dos lecturas. Por ejemplo que tras la máscara se oculta un militar. Es decir, siempre los ejércitos han defendido una posición y normalmente nunca han buscado la más adecuada, siempre están defendiendo intereses totalmente oscuros y en los que prevalece el capitalismo, valores que no tienen que ver con la pobreza o con la gente que necesita.
¿En la muestra sugiere un Güegüense homosexual?
El Güegüense tradicional se presenta muy macho, un gobernador muy macho, pero que esconde una sexualidad que no es expuesta. El Güegüense actual debe reconocer que no somos homofóbicos sino todo lo contrario, tolerantes.
¿Sus fotografías transgreden?
La idea de El Güegüense es transgredir, pero en lo positivismo, no quiero quedarme en la picaresca, como el tema de Lazarillo, no en el sentido de engañar, todo esos valores no son positivos en la sociedad, lo de engañar y mentir no me parece, y esto es lo que se ha reproducido en El Güegüense como un valor. En este sentido hay que hacer una valoración, respeto la obra en sí misma, porque deja mucho que desear.
Vamos a quitarnos un poco el velo de la cara y ver realmente el contenido de la obra, he hablado con muchas personas y me han dado estos mensajes que bien pueden aplicarse a Nicaragua, España o al mundo, por eso creo que El Güegüense al ser Patrimonio de la Humanidad hay que darle una nueva lectura.