Lectores frecuentes de esta columna saben que el enfoque de mis últimas columnas ha sido en los beneficios nutricionales de frutas y verduras, producidas en Nicaragua, y hoy sigo con el mismo tema.
¿Sabía usted que la albahaca, ingrediente común en la cocina italiana o tailandesa, tiene un perfil nutricional extraordinariamente beneficioso? Es una fuente excelente de la vitamina K (más que 75 por ciento del requisito diario), y una fuente muy buena de hierro, calcio, y la vitamina A (más que 50 por ciento del requisito diario), y una buena fuente (25 por ciento o más) de magnesio, vitamina C y potasio. Además, estudios científicos han mostrado que la albahaca tiene componentes que interrumpen el crecimiento de algunos tipos de bacteria en la comida, como Listeria monocytogenes, Staphylococcus áureas, y Escherichia coli O:157:H7. Claro que la cantidad de la bacteria en relación con la cantidad de la albahaca influye en la eficacia de la hierba.
Además brinda un tentador sabor a platillos diversificados y muchos nutrientes con poquísimas calorías (cinco hojas tienen como dos calorías). La albahaca está siendo tomada por pacientes que reciben quimioterapia, para disminuir las náuseas.
En Nicaragua la albahaca se cultiva orgánicamente o de manera convencional. Puede cultivarla en su huerto familiar. Lo mejor es comer las hojas recién cosechadas y sin cocinarlas.