Por elección o exilio,
a la luz hay que ir
para quemarse,
horca radiante
en la que se muere iluminado.
Por elección o exilio,
fugaz como el sol de las cinco
a la luz hay que ir
para quemarse,
las alas,
el deseo nómada
el complejo de avestruz
de tubérculo sabio
de cofia.
Por elección o exilio,
a la luz hay que ir
con los ojos en blanco,
cegados en la llama,
carbonizados
por las chispas del vuelo.
Fabricio Estrada. (Guatemala, 1974). Premio de Juegos Florales San Marcos de Ocotepeque, rama de poesía. 1997. POEMARIOS PUBLICADOS: Sextos de Lluvia, 1998; Poemas contra el miedo, 2001; Solares, 2004; Imposible un ángel (antología), 2005.