14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.

La palabra amor

Sacerdote católico En el texto bíblico de este domingo (Mateo 22, 34-40) encontramos que la síntesis de la enseñanza de Jesús está en el amar. La palabra amor la utilizamos de manera frecuente, pero no siempre en el sentido correcto si interpretamos a la luz de la fe su significado concreto. El amor puede ser […]

Sacerdote católico

En el texto bíblico de este domingo (Mateo 22, 34-40) encontramos que la síntesis de la enseñanza de Jesús está en el amar.

La palabra amor la utilizamos de manera frecuente, pero no siempre en el sentido correcto si interpretamos a la luz de la fe su significado concreto.

El amor puede ser la expresión de un sentimiento o atracción, pero también lo podemos asociar a la solidaridad y el compromiso. Cuando se les conjuga y se les enrumba a motivos nobles, es algo grandioso.

Pero nosotros desprestigiamos la palabra amor desde el instante en que nuestras acciones son contrarias a su contenido.

¿Qué es lo que Dios quiere de nosotros? ¿En qué debemos concentrar nuestras energías? Allí está el sentido de la pregunta que le hace a Jesús uno de los fariseos que era experto en la ley: “Cuál es el mandamiento principal de la Ley? Jesús al contestar cita una frase del libro del Deuteronomio 6,5 “Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente”.

Aquí se expresa que lo fundamental es amar a Dios con todas las fuerzas que tengamos, sin ninguna excepción y por eso el “todo” nos indica que debe ser absoluto. Son varias facultades las que se enumeran.

1. El corazón. Que es la dimensión de la voluntad del hombre. Es su querer, donde se toman las decisiones.

2. El alma. En la Sagrada Escritura representa la potencia de la vida.

3. La mente. Es la dimensión intelectual o bien la capacidad de representar el mundo.

Luego el Señor agrega que el segundo mandamiento es semejante al primero: “Amarás a tu prójimo como a ti mismo”. Amar a Dios y al prójimo es la esencia de toda la ley y los profetas.

El amor por uno mismo no es egocentrismo sino una buena autoestima, en la cual una persona sana acepta con tranquilidad lo que es y lo que tiene, conformando su personalidad, potencialidades y reconociendo sus limitaciones. Puede entonces amarse y amar al prójimo.

Por el contrario, una persona con baja autoestima no se acepta, está intranquila, no puede integrar su personalidad, ni equilibrar sus potencialidades, ni reconocer sus limitaciones. Si no se ama a sí misma no puede amar al prójimo.

Hoy, aunque los seres humanos estemos físicamente cerca unos de otros, emotivamente podemos estar muy distantes, construyendo muros de intolerancia, marginación, egolatría, ambiciones desmedidas, que crean mucho dolor en la humanidad.

Aunque hablemos del amor, cantemos al amor, si no comprendemos que el amor exagerado hacia uno mismo con desprecio al hermano, solamente puede producir enemistad, resentimiento, desigualdad, soledad, estamos construyendo una sociedad del odio. Por el contrario, si comprendemos que el amor al prójimo, hasta el sacrificio de sí mismo por el bien de los otros, estaremos construyendo una sociedad del amor. Amar es dar. Todos tenemos algo que dar, desde una sonrisa hasta la propia vida. Nadie está exento de esta posibilidad, que hará de este mundo un hogar agradable donde podamos vivir.

Amor es hacer cosas en favor del triste, desvalido, necesitado, enfermo. No por imposición obligatoria sino por libre voluntad, como respuesta al llamado de esa fuerza vital que mora en nuestros corazones y habla a nuestras conciencias.

El impulso del amor es la respuesta a la invitación de Dios para ser como Él. No es juego de palabras. No es en la definición sino en el actuar donde deja de ser concepto muerto y toma vida la palabra amor.

Religión y Fe

Puede interesarte

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí