El exmagistrado de apelaciones, Alfonso Dávila Barboza, criticó que el sistema judicial nicaragüense es tan desacreditado hasta el punto que “convierte la cocaína en talco en cuestión de minutos”. El jurista critica la falta de independencia de este poder del Estado afirmando que “ahí todo se resuelve bajo intereses políticos”.
[doap_box title=”Trabas a Bolaños” box_color=”#336699″ class=”aside-box”]El jurista Alfonso Dávila Barboza recuerda que durante la presidencia de Enrique Bolaños hubo dos vacantes en la Corte Suprema de Justicia (CSJ), para lo cual el expresidente propuso candidatos, los cuales no logró que fueran aceptados por la Asamblea Nacional.
“Lamentablemente él (Bolaños) no logró poner magistrados en el periodo que fue presidente de la República y eso demuestra que el poder judicial ha sido manipulado por intereses políticos desde hace años, haciéndole daño a la República”, finalizó Dávila Barboza, quien menciona que él nunca llegó a ser magistrado de la CSJ por su ideología.[/doap_box]
“El poder judicial no ha tenido la autonomía que merece en los últimos años. Lo que interesa es la lealtad política y la obediencia”, dijo Dávila Barboza, quien lamentó que la Constitución Política con sus reformas garanticen que estén los intereses políticos del ejecutivo sobre los intereses de la República.
El exprocurador Alberto Novoa aseguró que el sistema judicial institucional ha colapsado por su partidización y destacó que “no ofrece garantías de credibilidad” a los ciudadanos nicaragüenses.
MAGISTRADOS AL SERVICIO DE ORTEGA
“Las personas que han llegado a la Suprema Corte están, más que por méritos, por decisiones partidarias de Daniel Ortega”, argumentó Novoa, quien expone la reforma vía judicial al artículo 147 de la Constitución Política, que prohibía la reelección, como ejemplo del poder del presidente inconstitucional Ortega sobre la Corte Suprema de Justicia (CSJ), a quien los magistrados judiciales lo facultaron para ser candidato en 2011 cuando estaba prohibido constitucionalmente.
José Pallais, expresidente de la comisión de Justicia de la Asamblea Nacional, menciona que el poder judicial es muy importante al ser el que debería velar por aplicar las leyes y lograr un balance en la administración de los poderes del Estado.
“(Antes) mal que bien se mantenía cierta independencia y los magistrados cuidaban su nombre y su prestigio. Los magistrados ahora tienen que demostrar su fidelidad al dictador”, mencionó Pallais.
CAPACIDAD CUESTIONABLE
El jurista Sergio García Quintero también hace fuertes críticas a los magistrados de la CSJ al afirmar que “la capacidad intelectual y la formación académica (de los magistrados) es sumamente cuestionable”.
García Quintero resalta el trabajo de exmagistrados “que vimos en la Corte Suprema hace bastante años, como Alejandro Serrano Caldera, Roberto Argüello Hurtado, magistrados que le dieron un enorme prestigio”, catalogando a los actuales como “figuras de opereta” que no tienen preparación.
“Solo esperan la seña que les hacen al que favorecieron con la reforma transformación del artículo 147 de la Constitución”, dijo García Quintero.
CSJ DEBE VELAR PORESTADO DE DERECHO
Para Pallais, es importante velar por el Estado de Derecho para rescatar la democracia en Nicaragua y terminar con el sometimiento de todos los poderes ante el Ejecutivo.
El exdiputado señala que los cambios urgentes en Nicaragua no se limitan al poder electoral, sino que es un requisito en todos los poderes del Estado para recuperar la democracia y hacer de estas instituciones órganos más creíbles, con funcionarios honestos que velen por los intereses sin importar ideologías.
“Cambiar el poder electoral es condición sine qua non (imprescindible) para que haya elecciones creíbles y cambiar el sistema de justicia es condición indispensable para que existan condiciones para asegurar el Estado de Derecho en el país, pero no vemos voluntad política. Ortega está en su zona de confort”, afirmó el expresidente de la Comisión de Justicia.
(Antes) mal que bien se mantenía cierta independencia… Los magistrados ahora tienen que demostrar su fidelidad al dictador”. José Pallais, expresidente de la Comisión de Justicia
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