De niño Leonardo Chimmy Morales practicó taekwondo y después ingresó a las artes marciales mixtas. Le gusta dibujar y el próximo año planea estudiar diseño gráfico. Confiesa que no es de llorar fácil y se avergüenza de sus derrotas.
¿Su película favorita?
Las de Rocky Balboa.
¿Cuántas tazas de café toma al día?
No tomo café. Me pone hiperactivo. Me cae pesado y después me quedo sin energías.
¿Ha comido algo raro o asqueroso?
No, yo no como muchas cosas. Por ejemplo, no tomo sopas ni como carnes rojas.
Si pudiera ir al último concierto de su vida, ¿cuál sería?
A uno de Metallica.
¿Qué es lo más vergonzoso que le ha pasado?
Las derrotas que he tenido en mi vida.
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¿Algún apodo?
Me dicen Chimmy. Es un abreviado que me puso mi familia, porque era el único niño que había
en la casa y me decían chimirringo.
¿Cuántos tatuajes tiene?
Cuatro. Tengo uno de la máscara con la que salgo a pelear, otra máscara, un samurai y un gladiador.
Los últimos son como personajes que nunca se rinden.
¿Ha tenido experiencias con fantasmas?
No, pero sí creo en cosas así. Pienso que si me sale uno es que ya me voy a morir.
¿De niño tenía amigos imaginarios?
Jugaba con palitos y me los imaginaba con brazos.
¿Cambiaría algo de su pasado?
Muchas cosas. Tomaría los estudios muy en serio. Me esforzaría más.
¿De niño qué quería ser?
Diseñador gráfico. Siempre me ha gustado dibujar y sacar lo que tengo en la cabeza.
¿Practica o practicó otro deporte?
Practiqué taekwondo desde los siete años hasta los 18 años. Después he hecho artes marciales mixtas.