En un acto sencillo, que no fue más allá de los 30 minutos, este domingo se inauguraron en Managua los II Juegos Paracentroamericanos en el Polideportivo Alexis Argüello. Una galería de las mejores imágenes
Fotogalería | Así se vivieron los tres primeros días en los Juegos Paracentroamericanos 2018
Martes 23, Enero 2018
Guatemala, Nicaragua, Panamá y El Salvador dividieron fuerzas este martes en levantamiento de potencia, al ganar sendas medallas de oro. El nicaragüense Enoc Ponza logró el oro en los 59 kilogramos masculino. LA PRENSA/CARLOS VALLE
En un acto sencillo, que no fue más allá de los 30 minutos, este domingo se inauguraron en Managua los II Juegos Paracentroamericanos en el Polideportivo Alexis Argüello. LAPRENSA/WILMER LÓPEZ
Más de 300 atletas discapacitados de Nicaragua, Costa Rica, Honduras, El Salvador, Guatemala y Panamá participan en estos II Juegos Paracentroamericanos. LAPRENSA/WILMER LÓPEZ
Vacío se notó el Polideportivo Alexis Argüello el día de la inauguración de los II Juegos Paracentroamericanos, que se realizan en Managua entre el 21 y 28 de enero. LAPRENSA/WILMER LÓPEZ
Los atletas con discapacidad competirán en seis disciplinas: atletismo, baloncesto en silla de ruedas, levantamiento de pesas, natación, así como en goalball y bocha, que son dos disciplinas especiales. LA PRENSA/CARLOS VALLE.
El bocha es un deporte para personas en sillas de ruedas, que tienen parálisis cerebral o discapacidad física severa, y se practica de forma individual, por pareja, o equipo. Consiste en lanzar pelotas lo más cerca posible de un balón blanco que sirve de objetivo, y gana aquella persona cuya pelota termine más cerca de la blanca. LA PRENSA/CARLOS VALLE
La competencia de levantamiento de potencia fue animada por una buena cantidad de asistentes, que vieron cómo los pequeños fortachones lograban elevar pesos insospechados para ellos. FOTO/LA PRENSA/CARLOS VALLE
La Selección Nicaragüense de Baloncesto en Silla de Ruedas tuvo un buen arranque. En la imagen Guatemala vs Honduras durante un partido este martes. LA PRENSA/CARLOS VALLE