Ciro Immobile no gana los 36 millones de dólares de Cristiano Ronaldo (gana 4.3) y está valorado en 40 millones, tampoco ha tenido una exitosa carrera a nivel internacional, dejando huellas imperecedera. Sin embargo, demostró ser un competidor natural, disfrutó el reto de Ronaldo por la lucha del liderato de goleo en Italia, la carrera por la Bota de Oro y no se ahogó en el intento, sino que desde la Lazio frustró el ímpetu del luso. Acostumbrado a remar contra la corriente, de pequeño lo rechazaron en el Parma por su baja estatura y ahora encontró un espacio para su nombre en la historia del futbol italiano.
Immobile marcó 36 goles, entró a ser parte del nuevo tridente capaz de romper la hegemonía de Messi y Cristiano Ronaldo. Antes de él, solo Diego Forlán y Luis Suárez habían sido capaces de detener en la Bota de Oro al portugués y argentino. Ronaldo quedó con 31 goles y Robert Lewandowski, quien se despidió de la Bundesliga a ocho goles de Immobile, agonizó lentamente viendo cómo perdí la ventaja en la recta final. Messi apenas rozó los 25 goles, aunque incrementó sus asistencias.
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Luca Toni (2006) y Francesco Totti (2007) habían sido los únicos italianos en conseguir la Bota de Oro. El experimentado jugador que pasó por el Dortmund, Sevilla y fue firmado joven por la Juventus, pero cedido en préstamo a otros clubes, se dedica a los videos juegos y a compartir tiempo con su esposa, influencer, cuando no está marcando goles. Todavía Immobile jugó el último partido de la Serie A contra el Nápoles y le dio tiempo para empatar el récord histórico del torneo de liga en poder de Higuaín (36). En total tiene 181 tantos en 353 partidos entre clubes y Selección Nacional de Italia.
Cristiano perdió una batalla, pero aún le queda la guerra de la Champions League, mientras Immobile falló con la Lazio en la Europa League, siendo eliminados en su visita al Rennes.