Nicaragua no tiene mucho que celebrar este 10 de diciembre, Día de los Derechos Humanos. De acuerdo a los defensores de Derechos Humanos lo que hemos tenido durante el 2020 son atrasos en el cumplimiento y protección de estos derechos fundamentales.
“Miramos una directa violación hacia los derechos políticos y civiles de todos los nicaragüenses sin excepción, lo que ha generado que hasta el día de hoy en Nicaragua exista una permanente crisis de violación de derechos humanos con consecuencias graves hacia los mismos” expresa el Doctor. Álvaro Leiva, Secretario Ejecutivo de la Asociación Nicaragüense Pro-Derechos Humanos (ANPDH).
Y cada día se buscan nuevas formas de reprimir al pueblo, con el objetivo de crear zozobra e inestabilidad en la población, “vemos que la destrucción progresiva de los derechos humanos avanza cada día y como que este régimen dictatorial tuviera una iniciativa especial para inventar acciones de represión, cada día usan nuevos métodos, tienen una creatividad impresionante para la maldad”, señala la doctora Vilma Núñez, Presidenta del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh).
“Nicaragua en el año 2020 no tuvo ningún avance en el tema de derechos humanos, sino más bien con la pandemia se vino a agravar la situación de la población nicaragüense y observamos que ha habido una inoperancia y una completa negligencia estatal para atender la gran crisis de derechos humanos que fue desatada en el año 2018, sino también por la arremetida de la pandemia y de los huracana Eta y Iota”, afirma Braulio Abarca, defensor de DDHH del Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca +.
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Comenta que en los informes que ha presentado Nicaragua sobre derechos de la niñez y de las mujeres, así como en la segunda revisión del Examen Periódico Universal se comprueba que no hay avance en materia del cumplimiento de los derechos fundamentales.
Indica que muestra de este retroceso es el incremento en la cantidad de presos políticos y la creación de las leyes de Regulación de Agentes Extranjeros y la Ley de Ciberdelitos conocidas como leyes mordaza.
Periodismo ciudadano y empoderamiento de DDHH
Guillermo Medrano, Coordinador de Derechos Humanos de la Fundación Violeta Barrios de Chamorro, considera que hay un avance con el desarrollo del periodismo y colaboración ciudadana, así como en el empoderamiento de la población de sus derechos fundamentales.
“La gente ha comenzado a hacer conciencia de que los derechos humanos no son ninguna dádiva de ningún gobierno. Por lo tanto, los ciudadanos se están empoderando de sus derechos y están reclamándolos. Retomemos y tomemos como referencia que no podemos invocar un derecho si no lo conocemos y en este particular los ciudadanos están conociendo sus derechos, los están reclamando e invocando su cumplimiento y eso es un valor agregado de la construcción de ciudadanía”, remarca.
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Igualmente, la doctora Núñez señala como avance que la población está consciente que se debe continuar en la lucha por el respeto de los derechos humanos “hay conciencia en la gente de que tiene que luchar y que está muy firme en su propósito…Daniel Ortega no ha podido desmontar eso y eso sí se puede considerar como avance”, expresa.
También, menciona como avance, que se ha mantenido la atención internacional en la situación del país, pues aunque la efectividad de los diferentes mecanismos de derechos humanos son relativos, “con declaraciones, con resoluciones y con informes muy fundamentados contribuyen a defender derechos, son instrumentos de lucha eficaces”, pero sin duda deben estar acompañados de la lucha permanente de la población.
Covid-19 y Derechos Humanos
A 72 años de la declaración de los Derechos Humanos en 1948. Las Naciones Unidas hicieron el llamado que ante la pandemia del Covid-19 se centrara este tema en “reconstruir para mejorar”, asegurándose que los derechos humanos fueran la base para los esfuerzos de recuperación de los países”.
Por su parte la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) adoptó el 10 de abril de este año la Resolución No. 01/20 Pandemia y Derechos Humanos en las Américas. La resolución se realizó bajo la convicción de que las medidas adoptadas por los Estados en la atención y contención del virus deben tener como centro el pleno respeto de los derechos humanos y despidió a médicos, mientras en otros países se contrataba este personal incluso extranjero.
En este caso Abarca remarca que en lugar de crear medidas para contener el Covid-19 con un enfoque de derechos humanos, el Estado de Nicaragua ocultó información, no brindó protección a grupos vulnerables y vendió pruebas para detectar el virus. “Como colectivo derechos humanos se han estado documentando, dando seguimiento a esta situación y observamos que hay una completa negligencia del Estado. Miles de personas han fallecido por el Covid-19, no hay una protección debida, no hay protocolos de seguridad, no existe ningún tipo de acciones positivas para poder salvaguardar la vida de las personas en Nicaragua”, indica.
Nicaragua de retroceso en DDHH
Sin duda los escenarios de represión descritos anteriormente y la falta de interés en crear acciones con enfoque en derechos humanos ha dejado un sin número de retrocesos en este tema.
Uno de los retrocesos más remarcables para la doctora Núñez es el aumento de la impunidad y el uso de las instituciones estatales en la represión, pues las instituciones han sido utilizadas para crear el llamado “terrorismo fiscal”, contra empresas como forma de represión. “La impunidad está creciendo, el acceso a la justicia, imposible, no hay poder judicial independiente, o sea, la destrucción de las instituciones encargadas de proteger derechos humanos, han sido destruidas en su institucionalidad”, afirma la presidenta del Cenidh.
Además, no se puede dejar de mencionar los aumentos en las tarifas de servicios básicos como la electricidad y las reformas que se pretenden hacer para privatizar los servicios de agua, estas aunque no lo parezcan, también son violaciones a los derechos fundamentales. “Son derechos humanos que deben garantizar los gobiernos democráticos”, recuerda la doctora Núñez.
Resistir y defender DDHH
Abarca indica que el reto principal es “resistir”. “La población nicaragüense tiene como desafío principal seguir resistiendo ante la represión, ante los embates de una dictadura que en vez de proteger a la población la reprimen. Lo que hace acallar o silenciar las voces de las personas que ejercen sus derechos ciudadanos, la libertad de expresión contemplada en la constitución política”, señala.
Medrano considera que el principal reto es trabajar juntos para que el 2021 sea un año esperanzador, donde podamos tener la oportunidad de recuperar la democracia para construir la república con la que soñó Pedro Joaquín Chamorro Cardenal.
“En el año 2021 tenemos que trabajar unidos, de la mano por buscar el restablecimiento de las libertades públicas, para cambiar de un régimen autoritario a un régimen democrático. Donde no tengas que enseñar un carnet para buscar un trabajo o para recibir un servicio público como salud o educación”, comenta Medrano.
Por su parte el doctor Leiva, considera que el mayor reto del 2021 debe estar enfocado en buscar la justicia para todas las víctimas de violaciones de derechos humanos, pues sin justica no se puede reconstruir la paz social.
“Tiene que estar enfocado hacia el tema de la justicia, a fin de que podamos investigar, procesar y castigar a aquellos que de manera directa han hecho violaciones graves hacia los derechos humanos de los nicaragüenses, han cometido delitos de lesa humanidad y genocidio viral, en contra de miles de víctimas de violaciones de derechos humanos en nuestra sociedad nicaragüense”, expresa Leiva.
La Declaración Universal de los Derechos Humanos es un documento histórico que proclama los derechos inalienables que corresponden a toda persona como ser humano, independientemente de su raza, color, religión, sexo, idioma, opinión política o de otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición. Está disponible en más de 500 lenguas y es el documento que más se ha traducido en todo el mundo.