El opositor Irving Larios, de 63 años de edad, cumple hoy 320 días en las celdas de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), conocida como el nuevo Chipote. Fue declarado culpable por el supuesto delito de “conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional” y “propagación de noticias falsas”. Le impusieron 13 años de prisión, además de la inhabilitación para ejercer cargos públicos y 800 días multa, equivalentes a 160 mil córdobas. A pesar de ser adulto mayor Larios es mantenido en estas cárceles en las que se ha denunciado malos tratos y torturas.
El artículo 176 del Código Procesal Penal (CPP), relacionado con la Sustitución de prisión preventiva por domiciliaria, explica que “el juez puede sustituir la prisión preventiva por prisión domiciliaria, entre otros casos, cuando se trate de: 1. Mujeres en los tres últimos meses de embarazo; 2. Madres durante la lactancia de sus hijos hasta los seis meses posteriores al nacimiento, o 3. Personas valetudinarias o afectadas por una enfermedad en fase terminal debidamente comprobada”.
Lea además: Irving Larios, condenado a 13 años de prisión
El juicio contra este opositor se realizó el 28 de febrero en la DAJ. Larios es sociólogo, economista, disidente del Frente Sandinista y forma parte de la Articulación de Movimientos Sociales (AMS).
“Me acusan por trabajar por la justicia social y por trabajar por un mundo en el que se pueda vivir con dignidad. En Nicaragua urge restaurar la democracia y yo soy y seré siempre un defensor de los derechos humanos”, fueron las palabras que alcanzó a decir el privado de libertad durante el juicio, en el único momento que las autoridades le permitieron hablar.
Aunque el Gobierno ya ha mandado a arresto domiciliario a algunos de los adultos mayores, aún permanecen en la DAJ otros que incluso presentan una delicada situación de salud. Entre ellos Violeta Granera, de 68 años de edad. En la semana de su captura tenía que realizarse exámenes relacionados con el corazón y padece de presión alta, según advirtió su hijo Julio Sandino Granera.
Lea también: Los ocho presos políticos adultos mayores que mantiene encarcelados el régimen
Dora María Téllez, tiene de 65 años, sus familiares han asegurado que no padece de enfermedades, pero solo han podido verla en nueve ocasiones, en más de un año de estar en prisión.