Algunos familiares de presos políticos detenidos en las celdas de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), conocidas como el nuevo Chipote, comentaron que al llevar la paquetería se les indicó que solamente los familiares podían entregar paquetes y esto complica la situación para algunas familias que se apoyan de otras personas para realizar la entrega tres veces al día, por trabajo, por ser de departamentos o por encontrarse fuera del país.
“Hay familiares que dependen de personas como choferes que les ayuden porque no puede ir a dejar paquetería o no viven en el país”, aclaró una fuente a LA PRENSA.
La medida es igualmente arbitraria porque ha sido a nivel de “comentarios” de las autoridades de la DAJ a algunos familiares, pero no se realizó una notificación oficial.
Berta Valle, esposa del exprecandidato presidencial Félix Maradiaga, señaló que a su cuñada le comentaron otros familiares, pero no le han notificado de la medida. “Desde ahí hay arbitrariedades en el manejo de esta situación. Para nosotros eso sería sumamente grave porque hasta la fecha nosotros nos habíamos apoyado con otros familiares que nos hacían el favor de llevarle las cosas al Chipote, entre ellas las bebidas y de no ser posible seguirlo haciendo bajo ese método no podríamos nosotros ir diariamente al Chipote”, explicó.
Muchos de los familiares de los presos políticos trabajan y la entrega de paquetería se realiza tres veces al día, por lo que deben de faltar a sus trabajos. “No tienen la capacidad de dejar el trabajo para ir al Chipote hasta dos o tres veces al día. Eso implicaría que nada más los fines de semana podría ir al Chipote”, señaló Valle.
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En ese caso, hizo énfasis en que se debería exigir una regularización en el proceso de manejo de paquetería para que los familiares puedan dejar los paquetes los fines de semana con los productos alimenticios de toda la semana. “Ir todos los días es desgastante en términos económicos y de tiempo, y emocionalmente porque los familiares, las personas que van al Chipote, se exponen a tener que pasar el momento de enfrentar a los oficiales que no son nada amigables”, agregó.
Confunden o intercambian paquetes de presos en la DAJ
Una de las irregularidades que los familiares de los presos políticos han observado es el “intercambio” de paquetes. Lo que le llevan a un preso político es entregado a otro. Señalaron que no saben si es que los oficiales confunden los paquetes o realizan estos intercambios de manera intencional.
“Nos hemos enterado que nuestros familiares no reciben los productos que nosotros llevamos diariamente y nos preguntamos dónde están esos productos. Nos hemos dado cuenta que los productos se los entregan a presos diferentes. Un día alguien lleva leche de avena para una persona y resulta que se la entregaron a otro preso político que no correspondía a la de ese familiar”, comentaron.
Los familiares esperan que esta medida no sea aplicada o que no sea “una forma de seguir con la tortura” a los presos políticos. “Sería lamentable que después de todo lo que les han hecho estén condicionando la entrega de paquetería o de productos”.
Interrogatorios a familiares
Otra de las medidas que los familiares comentaron a LA PRENSA es que un policía está interrogando a los que llegan a dejar paquetería. “Un policía interrogando, haciendo preguntas, como quiénes y cuántos son los familiares que llegan a visitar a los presos políticos, que dónde viven, dónde compran la paquetería”, indicaron.