Los presos políticos en las celdas de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), más conocidas como el nuevo Chipote, están sufriendo tortura blanca y psicológica sistemáticamente, de acuerdo a denuncias realizadas por familiares, organizaciones y defensores de derechos humanos. El Instituto Casla emitió un comunicado sumándose a este reclamo.
«El Instituto CASLA se suma a las voces que reclaman por la Inhumana situación en que se encuentran los presos políticos en Nicaragua y especialmente en el Centro de Torturas conocido como “El Chipote”, donde son sometidos a Torturas Blancas y Psicológicas sistemáticamente, castigándolos con prolongado Aislamiento en Solitario en celdas mínimas, prohibición de cualquier contacto auditivo con terceras personas, prohibición de cualquier tipo de distracción y deporte, sin siquiera poder tener una Biblia para los católicos o cualquier material de lectura, sin salir a la luz solar, sin recibir asistencia médica y tratamientos médicos oportunos, y recibiendo una dieta alimenticia desbalanceada y deficiente», indica el comunicado.
El instituto Casla es organizador de la campaña de apadrinamiento de presos políticos, que consiste en darle voz a quienes no tienen voz. “Una personalidad reconocida del mundo político, diplomático, profesional, intelectual o artístico escoge entre aquellos que hayan autorizado su apadrinamiento, para denunciar su caso en todos los espacios posibles donde esa persona sea influyente y en todas sus redes y las redes de la organización”, explica Tamara Suju, abogada defensora de Derechos Humanos, directora ejecutiva de Casla Institute y delegada de WJA ante la Corte Penal Internacional.
En el comunicado además el instituto Casla indica que «el régimen aplica este tipo de Torturas para quebrar a sus victimas, desequilibrarlos psicológicamente y desmejorar sus condiciones físicas al extremo, induciendo el grave deterioro físico y mental que quizá nunca más vuelvan a recuperar».
La denuncia resalta que hay presos políticos en huelga de hambre como Dora María Téllez, el abogado Roger Reyes, el periodista Miguel Mendoza y el sociólogo Irving Larios se encuentran en Huelga de Hambre, reclamando el cese del aislamiento, que se les permita ver a sus hijos menores y que mejoren las condiciones médicas y carcelarias.
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«El régimen ha prohibido las visitas y al día de hoy, se desconoce la situación en la que se encuentran, tanto de los huelguistas como del resto de los presos políticos recluidos en ese lugar ya que tienen mas de 70 días incomunicados. Hacemos un llamado a la Cruz Roja Nicaragüense, cuya misión es dar auxilio humanitario a la población en riesgo, para que gestionen una visita “In Situ” a la cárcel de “El Chipote” y constate y asista a los presos políticos, tanto a lo que están en Huelga de Hambre, como los que
permanecen aislados en las distintas celdas de tortura», afirma el Instituto Casla.
Asimismo, hacen un llamado a gremios del sector salud y los que tienen entre sus funciones la defensa de los derechos humanos como el Colegio de Abogados de Nicaragua, diputados, Jueces y Fiscales, así como a los representantes de Organismos Regionales, Universales o Multilaterales dentro de ese país, a hacerse eco de esta situación y presionar al régimen nicaragüense para que cese la Tortura y libere a los presos políticos.
«El silencio los hace cómplices del Crimen de la Tortura, penado internacionalmente. Por ultimo, pedimos a la Comunidad Internacional, incluyendo Gobiernos, Organismos Regionales, Multilaterales y Universales, a ejercer acciones persuasivas capaces de provocar la liberación de los presos políticos de este país», finaliza el comunicado.