Sin conocerse los motivos, la Dirección General de Migración y Extranjería (DGME) de Nicaragua lleva dos meses de omitir en sus reportes la cantidad de “atenciones” que brinda a migrantes que ingresan de forma irregular al país, por lo que entre enero y octubre de este año, esta cartera ha reportado 7,488 migrantes que ingresaron al territorio nicaragüense de esta forma, según una revisión realizada por LA PRENSA a las notas de prensa de esta cartera.
La DGME ―una instancia del Ministerio del Interior― durante las dos últimas semanas de abril tampoco brindó sus informes ni explicó las razones, por lo que se desconoce si la omisión de estos datos sobre migración irregular responde a que no se han detectado (una posibilidad lejana) o porque el régimen Ortega Murillo prefiere no darlas a conocer.
En los datos recopilados de la DGME se observa una considerable disminución en el número de migrantes irregulares que reportó a partir de abril con relación al mes anterior. En marzo de este año, reportó 1,692, mientras que en abril solamente 405, marcado en gran medida por la omisión de sus reportes por dos semanas.
En agosto, que fue el último mes en que esta instancia brindó información sobre los migrantes irregulares, reportó 270 migrantes.
Continúa contrastando con Honduras
Las cifras de migrantes que ingresan vía terrestre a Honduras, del Instituto Nacional de Migración (INMH) de este país, contrastan con las de Nicaragua. En agosto, el país vecino del norte reportó 18,734 migrantes que ingresaron de forma irregular a este país, la mayoría provenientes desde Nicaragua. En ese mismo mes, la DGME reportó 270.
Y en septiembre y octubre, cuando la DGME no reportó ingresos irregulares, Honduras registró 21,651 y 22,538 respectivamente.
Sin embargo, en las estadísticas de ambos países es notable una reducción de los reportes de migración irregular. Por ejemplo, en Honduras, en octubre de 2024 se registraron 22,538 migrantes, es decir 79,470 menos que los 102,008 que se reportaron en el mismo mes del año pasado.
Además, entre enero y octubre de este año se reportan 107,528 migrantes irregulares menos en comparación con el mismo período del año pasado.
Régimen señalado como facilitador de la migración irregular
El régimen Ortega Murillo es señalado por Estados Unidos de facilitar y promover la migración irregular utilizando como métodos los vuelos chárter que aterrizan en Nicaragua para que los migrantes continúen su rumbo hacia Estados Unidos. Por esta razón, el 13 de junio de 2024 EE. UU. impuso restricciones de visa a un ejecutivo de una empresa de transporte de vuelos chárter por facilitar la migración irregular hacia ese país a través de Nicaragua desde fuera del Hemisferio Occidental.
“Esencialmente, esto es la instrumentalización de un fenómeno de movilidad humana por parte del régimen de Daniel Ortega para generar una crisis humanitaria en la frontera con Estados Unidos y esto explica la intervención de varios actores y países. Esto es una guerra híbrida que trata de desacreditar o desprestigiar a quienes considera enemigos políticos”, dijo el abogado y especialista en derechos humanos Uriel Pineda, en entrevistas anteriores a LA PRENSA.
Cifras en Panamá se reducen
En el caso de Panamá, los cruces por la Selva del Darién también registran una disminución con relación al año pasado. Entre enero y septiembre de este año, ingresaron de forma irregular 263,296 migrantes, inferior a los 408,972 que se registraron durante el mismo período del año pasado.
La disminución entre un año y el otro puede deberse a que Estados Unidos y el nuevo gobierno de José Raúl Mulino, en Panamá, firmaron el pasado 1 de julio un nuevo acuerdo contra la migración irregular, con el supuesto objetivo de evitar que el crimen organizado transnacional y las redes de contrabando de personas exploten a migrantes vulnerables en su paso por la Selva del Darién.
La medida pretende reducir los flujos migratorios que ingresan desde el Darién y que llegan a la frontera sur de Estados Unidos, luego de pasar por Centroamérica y México. No obstante, Estados Unidos no tiene claridad de cuántas repatriaciones se realizarán por mes y tampoco está enfocado a una determinada nacionalidad.