Algunos miembros del Partido Demócrata responsabilizaron en las últimas horas al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, de la derrota de la candidata demócrata Kamala Harris frente al exmandatario Donald Trump, por no haberse retirado a tiempo para que la vicepresidenta pudiera hacer una mejor campaña.
A través de redes sociales, declaraciones a medios o filtraciones, algunas figuras del partido están criticando que Biden desperdiciara meses hasta su debacle en el debate frente a Trump en julio, que acabó con su abandono, y que Harris tuviera muy poco tiempo para construir su campaña.
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Uno de los asesores principales de Harris, David Plouffe, habló de la “pérdida devastadora” que sufrió Harris y, aunque no culpó directamente a nadie, dijo que la campaña de Harris “salió de un pozo profundo”.
Según declaraciones a Político de Jim Manley, un importante asistente del exlíder de la mayoría del Senado Harry Reid, “el país se dirige hacia una dirección muy peligrosa” y se debe en parte a la “arrogancia” de Biden.
“Es un buen hombre que puede estar orgulloso de sus logros. Pero su legado está hecho trizas”, afirmó.
Desde que la noche del martes se confirmara la debacle de Harris frente a Trump, el presidente Biden ha guardado silencio. Será hasta esta mañana de jueves cuando hable en un mensaje a la nación desde la Casa Blanca.
Por su parte, Harris reconoció ayer la victoria de Trump y afirmó que no dejará de luchar por que vuelva la luz a Estados Unidos. Ambos han hablado con Trump para felicitarlo y asegurarse de una transición pacífica.
Según Político, muchos demócratas creen que la avanzada edad de Biden, 81 años, las dudas sobre su agudeza mental y su impopularidad pusieron a los miembros del partido en una clara desventaja, y ahora se sienten furiosos por haberse visto obligados a apoyar durante meses a un candidato que los votantes habían dejado en claro que no querían.
El pasado julio, tras su desastroso desempeño en el debate frente a Trump, Biden abandonó la carrera a la presidencia “por el bien de Estados Unidos”, contó entonces, y entregó el testigo a Harris, quien sólo pudo hacer una campaña heredada de 107 días, como recordaba ayer la vicepresidenta.
En opinión de Mark Longabaugh, estratega demócrata y ex asesor del senador Bernie Sanders, “la verdad del asunto es que Biden debería haberse hecho a un lado antes y dejar que el partido elaborara un plan de juego más largo”.
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“Ella dirigió una campaña extraordinaria con una mano muy dura que le fue impuesta”, señaló.
En un mensaje de X, Tony West, exfiscal general asociado, agradeció el liderazgo de Harris de las últimas 15 semanas y llamó a la reflexión.
“Esperemos que en los próximos días se hagan evaluaciones desde el sillón, pero nadie puede decir que no atacamos esta noble causa con propósito, pasión, coraje y un amor descarado por el país”, afirmó.