El reclamo de la dictadura Ortega Murillo por la supuesta “usurpación” de funciones de la Secretaría General (SG) del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA) por parte de la Dirección del Equipo Ejecutivo de este órgano ―que pertenece a la SG―, refleja la crisis en la que se encuentra el Sistema al estar acéfalo desde noviembre del año pasado, ante el rechazo de los países miembros a los candidatos que ha presentado el régimen de Nicaragua por no cumplir con los requerimientos para el cargo, según refieren especialistas consultados por LA PRENSA.
El jueves 7 de noviembre, la vocera de la dictadura, Rosario Murillo, aseguró que existe una “usurpación” a las funciones del secretario general ―un cargo que se encuentra vacante desde el 17 de noviembre de 2023 cuando renunció Werner Vargas―, debido a que la Dirección Ejecutiva presentó una agenda para el año 2025, el presupuesto de la SG y envió comunicaciones a los representantes de los países miembros.
“Es un tema complejo porque miramos que una instancia de la SG, que es un órgano del SICA, ante la ausencia de su secretario general, de forma contingente asume roles de corte administrativo porque de lo contrario, la estructura se estancaría por completo. Esto refleja el estancamiento en el que se encuentra el Sistema”, explicó el politólogo Sergio Araya a este Diario.
Araya consideró que este impasse provocado por el régimen Ortega Murillo “pone a prueba” al Sistema y que esta crisis requiere la atención de todos los actores del mismo.
“Son indicadores inequívocos y es un reflejo del nivel de estancamiento de todo el Sistema. Esto debe llamar la atención de los jefes de Estado, los entes de cooperación y de todo el sistema. Estamos en un punto de inflexión para ver si realmente se desea potenciar la integración centroamericana o esto se va empobreciendo, solamente sosteniendo una burocracia que no impactará en la población”, dijo Araya.
LA PRENSA envió consultas a la SG para conocer más detalles sobre la supuesta comunicación de esta instancia y conocer su versión, pero hasta esta publicación no respondieron a los correos electrónicos enviados desde esta redacción.
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La SG está a cargo de un secretario nombrado por la reunión de presidentes por un período de cuatro años, es el más alto funcionario ejecutivo del SICA y sobre quien recae la representación legal del Sistema. A menos de dos años de que concluya el periodo de cuatro que le corresponde a Nicaragua ha sido muy difícil que los países miembros del SICA acepten a los candidatos nicaragüenses.
Recientemente, el régimen Ortega Murillo propuso a tres mujeres: Arling Patricia Alonso Gómez, diputada oficialista; María Amelia Coronel Kinloch, ministra del Interior, y Sonia Castro, asesora presidencial para temas de salud y exministra de Salud. Tanto Alonso como Castro están sancionadas por el Departamento de Estado de Estados Unidos, por lo que Echeverría advierte que si eligen a alguna de ellas pueden trasladar los efectos de esas sanciones a la institución y eso les impediría cumplir con las responsabilidades del cargo.
Equipo Ejecutivo se ocupa de la parte administrativa de la SG
El Protocolo de Tegucigalpa, que es el documento constitutivo del SICA, no establece nada sobre la Dirección Ejecutiva. Sin embargo, en el Portal del Sistema se señala como directora a Ingrid Figueroa, especialista en desarrollo internacional, gestión de la cooperación, diálogo político, programas y políticas de apoyo al emprendimiento. Además, hay diez funcionarios más que conforman el Equipo Directivo, que acompañan al secretario general en su gestión.
“La Dirección Ejecutiva de la SG se encarga del buen funcionamiento de la misma SG. Sin embargo, quien ejerce la Dirección Ejecutiva no tiene las facultades de cumplir con las obligaciones del SG. Por lo que el Sistema sin su secretario general no puede funcionar adecuadamente”, dijo el exasesor de la SG, Carlos Manuel Echeverría, a LA PRENSA.
Por estas razones, Echeverría no descarta que la directora del Equipo Ejecutivo actúa ante la ausencia de un secretario general y que esta medida no es una “usurpación”, puesto que, además, el cargo está vacante.
Institut des Amériques.
Régimen quiere inducir para que elijan a uno de sus candidatos
A consideración de Echeverría, la comunicación de la dictadura a los representantes de países miembros puede tener como objetivo “inducir” a que los demás países acepten la última terna que presentó.
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“Lo que el Gobierno de Nicaragua quiere hacer es inducir a los demás países para que aprueben las candidaturas para el cargo de secretario general que presente. Eso está difícil porque creo que los países tienen una responsabilidad de proponer candidatos adecuados y los otros países tienen la responsabilidad de escoger a alguien que realmente pueda ejercer el cargo con la capacidad requerida”, señaló.
Esta no sería una maniobra poco común del régimen. Por ejemplo, el 12 de junio, la dictadura nicaragüense, por medio del canciller Denis Moncada, amenazó a los integrantes del SICA con no ejercer la Presidencia Pro Témpore y no participar de las reuniones o actividades de ese organismo regional hasta que se nombre al secretario general del organismo. Sin embargo, posteriormente dio un paso hacia atrás y aseguró que sí aceptaría la Presidencia Pro Témpore.
De momento está por verse si los países miembros aceptarán a alguno de los candidatos propuestos por el régimen. LA PRENSA también consultó sobre este procedimiento, pero desde octubre no se obtuvo respuestas.