Por Isidro Rodríguez Silva
Donald Chamorro nació para la música y vive para ella. Comenzó a los once años y lleva una vida profesional desde hace casi treinta años, en un país donde hay pocos profesionales de la música clásica.
Una licenciatura en Artes y Letras por la Universidad Centroamericana UCA y los estudios de especialización en flauta traversa en La Habana, Cuba, lo marcan en su vida artística y docente, lo que le ha permitido impartir clases de Historia de la Música y Lenguaje Musical en la Universidad Autónoma de Nicaragua (UNAN-Managua) y en la UCA.
Años después, director de la Escuela Nacional de Música, para llegar al más alto nivel como instrumentista y director general de la Orquesta Nacional de Nicaragua. Pero su gran pasión, desde hace 17 años, es dirigir el grupo de cámara Kinteto, en consorcio con la Asociación de Promotores de la Cultura (APC), el Fondo Histórico documental de la Música Nicaragüense (Fonmunic) y Real Gobierno de Noruega.
Chamorro asevera que tiene nietos en el arte musical. Su actividad artística se ha articulado en los últimos años a través del grupo de cámara Kinteto a Fonmunic y la Asociación de Promotores de la Cultura, generando una experiencia pionera y fructífera. En el año 2008 recibió la Orden de la Independencia Cultural Rubén Darío.
ENSEÑANZA EN LOS COLEGIOS
El grupo de cámara Kinteto no solo se caracteriza por hacer presentaciones de la música clásica, sino que va más allá, es decir a un trabajo más valioso como es el rescate de nuestra música. ¿Cómo ha sido ese trabajo?
El otro enfoque es el docente, en este ámbito hemos desarrollado una metodología para la formación de instructores de música, misma que se ha implementado también para la danza y las artes visuales. Producto de esta labor hemos producido una cantidad de arreglos musicales, redacción de libros y materiales pedagógicos; hemos formado a más de una decena de instructores musicales con títulos reconocidos por las autoridades correspondientes.
Acompañamos con nuestro trabajo a Fonmunic en la investigación de la música y los músicos nicaragüenses y hemos creado el primer segmento musical televisivo llamado Viva la Música, donde tratamos de informar al gran público sobre diversos temas de ámbito musical.
¿La música de cámara es un género netamente académico, escrita e interpretada para un pequeño grupo de instrumentos. ¿Qué diferencia hay con otros grupos de cámara?
Hace poco tiempo la Real Embajada de Noruega realizó una consultoría externa para ver los resultados del trabajo cultural de los organismos que ellos han apoyado y en esa evaluación nos dio mucho gusto conocer las apreciaciones y criterios favorables a nuestro desempeño.
¿Por qué es importante el trabajo del grupo Kinteto en una país donde nos invaden con todo tipo de música?
En la década de los noventa más propiamente en 1994, formamos el grupo fundamentalmente con la inquietud de hacer música en el formato de cámara, es decir, para pequeños públicos y pequeños recintos.
Funcionamos básicamente de forma instrumental (aunque ocasionalmente acompañamos a un cantante o a un coro, somos una miniorquesta en potencia, pues contamos con dos instrumentos de la familia de las maderas y dos de las familias de las cuerdas y eventualmente el apoyo del teclado electrónico, el cual funciona supliendo timbres instrumentales.
En realidad, es una propuesta interesante en el sentido de que proponemos una nueva sonoridad, pero partiendo de las composiciones originales, aparte de que es una forma de poder llevar la música a más lugares y optimizando los recursos materiales disponibles. Por eso es nuestra importancia, ya que somos un faro de luz musical en este mar de música moderna.
EL FOLCLOR NICARAGÜENSE
¿Cuál es el trabajo de la música de cámara a partir de la música folclórica?
Es vestirla regiamente, es exactamente hacer lo mismo que hicieron los compositores de finales del período romántico de la música; es decir, tomar los ritmos y melodías autóctonos y sobre ellos construir una obra artística; en otros casos es solamente darle otros timbres, otro color y en todos los casos es reforzar nuestra “nicaraguanía”, nuestra identidad, lo que nos distingue en el concierto universal.
¿Cómo reacciona el público ante la música de cámara?
En general bien, además nosotros no solo hacemos un concierto frío, nos hemos planteado una actividad que es en sí misma una unidad didáctica que consta de una conferencia, una exposición de materiales de autor y un concierto, conversamos con el público, hacemos una actividad interactiva. La mayoría de las veces tenemos que jugar con las condiciones que no son las de una sala de concierto, pero nosotros estamos conscientes de ello, sabemos que hay que hacer esa labor de creación del público, de incentivar el gusto y disfrute por la música nacional y es algo que nos gusta hacer, en eso también somos pioneros.
¿Por qué son importantes los conciertos didácticos?
Como ya lo expresé, porque no hay muchas más formas de crear un público que disfrute y valore nuestra música. Si todos nos dedicáramos solamente a actividades recreativas y a producir grandes conciertos para un público que llega a una sala sin más, no estaríamos cimentando la formación de una cultura musical en nuestro pueblo.
¿Cómo valora la memoria musical histórica, una memoria que viene a ser un patrimonio histórico y musical?
Es algo de primer orden, es lo que nos permite preservar y darle un sentido coherente a nuestra música en sí misma y como expresión de cada momento histórico; por eso es que precisamente, desde hace más de dos años estamos trabajando con el apoyo del Instituto Nicaragüense de Cultura en la conformación del Museo Nicaragüense de la Música.
¿Cómo piensa desarrollar estas actividades?
Hemos pensado con el maestro Alfredo Barrera, coordinador de la Junta Directiva de Fonmunic, que las actividades educativas las podemos dividir en actividades realizadas en el Museo Nicaragüense de la Música, utilizando como base los materiales expuestos, conferencias, visitas guiadas, actividades organizadas en el Museo Nicaragüense de la Música pero sin relación directa con los materiales expuestos, como pueden ser ciclos de películas, talleres, conciertos, actividades que se realizan fuera del museo, pero basadas en los materiales expuestos, como pueden ser las exposiciones itinerantes y préstamo de materiales a escuelas y municipalidades.
¿Quiénes están involucrados en este Proyecto?
Kinteto y Fonmunic aportan el acervo patrimonial con el que cuentan la idea, más de 40 mil páginas manuscritas originales, investigaciones, libros, arreglos musicales, material visual con el que cuenta, el INC aporta el edificio que en sí mismo es un bien patrimonial, además que aspiramos a que en el futuro pueda aportar el estado un presupuesto para su funcionamiento, el gobierno de Noruega está aportando la rehabilitación del edificio, el Museo de la Música de Cuba nos aporta, al grupo gestor, la asesoría técnica en temas museológicos y museográficos, misma que estimamos óptima y oportuna, pues ese museo tiene el mismo enfoque dinámico y proactivo que tratamos desde ya de imprimirle al Museo Nicaragüense de la Música, además los amigos del Museo de la Música de Cuba, con su aval y copatrocinio han presentado un Proyecto de Colaboración triangular Andalucía-Cuba-Nicaragua que esperamos comience a dar sus frutos en el 2012.
MUSEO DE LA MÚSICA
¿Cuál es la visión para el futuro que tienen como grupo en el rescate y la difusión de la música nacional?
Nos gustaría seguir contando con la posibilidad de hacer conciertos didácticos, arreglos musicales sobre la base de los documentos patrimoniales que se encuentran en Fonmunic, profundizar las investigaciones musicales, la edición de otros libros, en fin también nos gustaría replicar la experiencia que hemos acumulado en la formación de grupos artísticos, tal vez en los barrios de Managua, porque estas son actividades que no se pagan solas y se necesita de un apoyo económico para sostenerlas en el tiempo. Ahora nuestra actividad central está enfocada en este momento en la conformación del Museo Nicaragüense de la Música.
Las colecciones que serán parte del inventario de este museo pertenecen en su gran mayoría al archivo musical del Fondo Histórico Documental de la Música Nicaragüense. Hemos visualizado la necesidad de las investigaciones sobre la música y los músicos nicaragüenses para contribuir con la misión educativa permanente esperamos poder promover la identidad cultural nicaragüense en su diversidad y como pilar del desarrollo humano sostenible.
Una vez constituido el museo pensamos desarrollar un conjunto de acciones organizativas y de promoción encaminada a la salvaguarda del patrimonio musical, especialmente de su son nica y la música norteña y caribeña, pensamos, bajo convocatoria del Instituto Nicaragüense de Cultura, instituir un premio nacional a la creación e interpretación musical, popular, tradicional y académica.
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