Navidad se acerca sigilosamente y con ella las ocasiones especiales para lucir un vestido de noche, una prenda que el resto del año permanece en el olvido y que esta temporada gana impulso, con una silueta que propone mostrar escote y pierna, para atraer la buena suerte en 2015.
Además de mucha piel, la receta para encontrar el look perfecto en estas fiestas también requiere una dosis extra de brillos —bien sean lentejuelas o pedrería— y un buen par de zapatos de altura, todo ello envuelto, a ser posible, con una majestuosa piel y aliñado con un poco de improvisación.
SACA TUS PIERNAS A PASEAR
Aunque en medio planeta, Navidad es igual a frío, la pasarela manda y este año las noches de gala sacarán a las piernas de su sempiterna reclusión de pantalones y falda larga. Todo ello armonizado eso sí, con la etiqueta de largo hasta los pies y la clave sofisticada que requieren las fechas señaladas.
Quien mejor ha sabido tomar el pulso de esta tendencia ha sido Atelier Versace, la versión de alta costura de la casa italiana, fundada por Gianni Versace, que subió a la pasarela el gusto por “lo vulgar” de las prostitutas de su Calabria natal.
Pero nada de vulgar, entre los modelos que propone la casa italiana para esta temporada se encuentran una serie de majestuosos trajes de noche en binomio blanco y negro que combinan “bodys” de lentejuelas con una interminable falda en raso atada con correas, cuya abertura lateral deja entrever hasta donde la pierna pierde su buen nombre. Un precioso juego de escotes asimétricos, peinado recogido y botas hasta las rodillas completan un “look”, tan adecuado para la alfombra roja, como inspirador para una fiesta navideña.
SACA PECHO
El escote es un lugar común del traje de noche, estas fiestas ganan el modelo en “v” y el que deja un hombro al descubierto. Si el primero se ha convertido en uno de los iconos de Elie Saab, uno de los preferidos por las actrices en la alfombra roja, el segundo es el hilo vertebral de la colección que firma Zuhair Murad.
Cierto es que esta temporada, el escote en pico ha alcanzado proporciones de vértigo, sobre todo en los diseños de aquellos creadores con gusto por el exceso. Jean Paul Gaultier lo impuso en varios de sus diseños de alta costura, mientras que Emilio Pucci, lo lleva al terreno del lejano oeste con minivestidos de estampados navajo.