- Representante del Vaticano “impresionado por devoción” a la Beata Sor María Romero
Juan José Solórzano, de Managua, llegó a tempranas horas de la mañana del pasado jueves 7 de agosto a la ciudad colonial de Granada, acompañado de su hijo Juan Israel Solórzano, quien alcanzó sanidad por la intercesión de Sor María Romero.
Solórzano también se hizo acompañar por su esposa, para estar presente en la misa que ofició el sacerdote y enviado especial de la Santa Sede, Enrico Dal Covolo, quien en su visita a Nicaragua constató la devoción por la monja de los pobres, quien fue beatificada por el ya fallecido Papa Juan Pablo II.
“Mi hijo nació ciego, pero por la intercesión de la beata Sor María Romero, el Señor lo ha sanado. Mi hijo no veía del todo; era totalmente ciego y los médicos me habían afirmado que no vería nunca: pero Sor María me le regresó la vista y está muy bien, ahora ve, juega y corre por todos lados”, dijo con evidente entusiasmo Juan José Solórzano, padre del niño Juan Israel Solórzano, de 5 años.
“Yo amo a Sor María. Hoy vine muy de mañana”, expresó un poco tímido el pequeño.
En medio de testimonios de sanidad, devoción y la presencia de fieles peregrinos de diferentes puntos del país, la Santa Sede ha constatado la gran devoción que los nicaragüenses tienen hacia la Beata Sor María Romero, quien se encuentra en proceso de canonización.
FALTA UN MILAGRO
La devoción y la fe mostradas por los nicaragüenses hacia la beata que toda su vida la dedicó a los más pobres impresionó al enviado especial de Roma, el sacerdote Enrico Dal Covolo.
“Estoy impresionado de la fama de santidad que los nicaragüenses tienen por Sor María”, fueron las palabras del enviado de Roma, quien casi no domina el idioma español.
“Hay mucha devoción por Sor María Romero, mucha devoción… y muchas gracias. Yo espero que una gracia haga posible la canonización; falta un milagro para la canonización”, afirmó a LA PRENSA.
No obstante, Covolo expresó que la canonización requiere de todo un proceso exhaustivo para constatar los milagros atribuidos, donde al final es la Santa Sede la que hace la valoración de los hechos para confirmarlo, pero insistió en que sólo falta un milagro para que la beata alcance la santificación.
Covolo confirmó a LA PRENSA que actualmente se le da seguimiento a la sanidad de un niño, y de confirmarse podría convertirse en el milagro que la Santa Sede espera para canonizar a Sor María Romero, fallecida un 7 de julio de 1977, en Las Peñitas, de León.
Sin embargo, para eso, explicó que la aprobación de ese milagro consiste en la certificación de parte del Obispo, para luego ser enviada a la Congregación de la Causa de los Santos, donde finalmente el Papa Benedicto XVI confirma la santidad de la beata con su firma.
“Sor María Romero tiene mucho valor cristiano pero en particular es una encarnación del carisma de Don Bosco y de Madre María Mazzarello”, confirmó Covolo.
MILAGROS EN LA SANTA SEDE
Por su parte, Sor Melania Martínez explicó que los milagros atribuidos a la beata ya existen y están en manos de la Santa Sede, sin embargo, dijo también que es impresionante cómo crece cada día la devoción por Sor María Romero.
“La devoción crece cada semana, cada día; yo lo veo a diario: con sanidades de cáncer, de tumor, libertad de privados de libertad, en fin, curaciones de todo tipo de enfermedad atribuidos a Sor María”, expresó Sor Melania, superiora de la Casa Sor María Romero.
La superiora de la Casa Sor María de Granada explicó que la Santa Sede tiene dos milagros atribuidos a Sor María y en la actualidad existen dos más, la sanidad de un niño de 5 años y la de un señor, quienes alcanzaron el milagro por la intercesión de la beata.
BUSCANDO MILAGRO
Danilo Suazo, de 39 años y su hija Massiel del Socorro Suazo, de 13 años, originarios de Diriomo, padecen de cáncer y tienen la esperanza en que Sor María Romero interceda por ellos ante Dios para ser sanados.
“Vine junto a mi hija, también con cáncer a buscar sanidad. Sabemos que Sor María va a interceder para que seamos sanados. Tenemos fe y esperanza; por eso hemos venido confiados. Sentimos que Sor María responderá nuestras oraciones”, afirmó con fe Danilo Suazo.