Para responder a la debacle de la familia como institución humana y divina, la Iglesia católica tendrá como objetivo pastoral para el 2015 fortalecer e impulsar una pastoral familiar sin fronteras para cristianizar a la institución familiar.
Así lo plantea monseñor Silvio Fonseca, vicario pastoral de Familia, Vida e Infancia de la Arquidiócesis de Managua.
“Es decir, que la pastoral familiar se realizará no solo en las parroquias, sino en colegios, centros de trabajo y medios de comunicación”, sostiene el guía espiritual.
A juicio de Fonseca, quien es doctor en Teología Moral, el trabajo pastoral que desarrollará la Iglesia católica en 2015 tiene como fin cristianizar a la familia, proponiendo a Jesús de Nazareno como modelo de vida.
“La Iglesia cristianizará a la familia proponiendo el hogar de Nazaret como modelo de virtudes, humanización y santificación”, indica monseñor Silvio Fonseca.
LA CARTA PASTORAL
El pasado 20 de diciembre los obispos de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) emitieron una carta pastoral sobre la Familia, titulada: Familia, mira a Jesús que te mira.
Entre los temas abordados en la carta pastoral se encuentran aspectos legales, culturales y morales que recogen el sentir de las familias. Fonseca insiste que el Estado está en la obligación de legislar leyes a favor de la familia, pero jamás diseñar leyes para tener control sobre la institución familiar.
“Las leyes deben favorecer a la protección de la institución familiar y de ninguna manera legislar para penetrar en la intimidad de la familia ni para controlarla a través de códigos o decretos”, señala el vicario de Familia.
En ese sentido, comenta: “Cada familia es un santuario donde se forma a la persona, al ciudadano y al cristiano. Los obispos han confirmado estos derechos humanos de la familia frente al Estado: la familia no debe delegar ni ceder al Estado sus derechos inalienables y sus responsabilidades”. (No. 5). Esta enseñanza es de capital importancia y su indefensión frente a la imposición de legisladores y gobernantes que se están atreviendo a decidir “en nombre de las familias”, asegura el religioso.
A criterio de monseñor Fonseca, las familias están experimentando una debacle moral de alcances insospechados y que la humanidad está pagando un alto precio.
La carta pastoral dice lo siguiente: “Existen fuerzas malignas que quieren desviar a la familia de sus nobles principios, promoviendo que cada quien haga lo que quiera, sin medir el daño que hacen a otras personas. Nuestros valores morales cristianos están siendo atacados y denigrados”, lamenta el sacerdote.
Identifico entre otros males el consumismo que explota la dignidad de las personas tomándolas como objeto de explotación sexual; muchos programas de televisión “que sin el menor escrúpulo se dedican a la pornografía y la violencia; muchas leyes con apariencia de bien pero influenciados por la ideología de género u otros intereses, pretenden despojar a las familias de su misión y destino”, reflexionó.
ara monseñor Silvio Fonseca, ante los ataques que la familia sufre por parte de organizaciones que promueven la ideología de género y leyes que afectan la estabilidad de la institución familiar, la Iglesia católica estará siempre por la defensa de la familia.
“La familia católica debe recuperar su protagonismo usurpado por ciertas organizaciones sociales. Los abogados católicos deben especializarse y unirse en el tema de la familia para defender sus derechos. La pastoral de la Iglesia debe aunar esfuerzos en una eficiente pastoral familiar para que nuestras familias sientan el amparo de Dios y de sus pastores”, reflexionó.
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