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Ficción vs. realidad

Siempre se dice que un icono del pop marca tendencia y, como tal, Britney Spears parece haber impuesto una nueva moda que trascendió las fronteras de los Estados Unidos: mujer que es mamá por primera vez, es abandonada por su marido. Eso fue lo que pasó con la pareja preferida de los brasileños, conformada por […]

Siempre se dice que un icono del pop marca tendencia y, como tal, Britney Spears parece haber impuesto una nueva moda que trascendió las fronteras de los Estados Unidos: mujer que es mamá por primera vez, es abandonada por su marido. Eso fue lo que pasó con la pareja preferida de los brasileños, conformada por Giovanna Antonelli y Murilo Benicio.

Ellos se conocieron grabando El Clon, una de las telenovelas de mayor audiencia de la historia que, además, fue vendida a gran parte del mundo. Pero, según dicen, el amor no nació durante las grabaciones sino una vez que éstas terminaron y se comenzaron a llamar hasta que se dieron cuenta de lo que sentían el uno por el otro.

Esos sentimientos fueron tan fuertes que ambos dejaron a sus respectivas parejas para juntarse. Pero las costumbres de Murilo, que a pesar de estudiar actuación desde los 11 años todavía no aprendió a distinguir la realidad de la ficción, hicieron de lo que iba a ser un matrimonio feliz, un fracaso.

Murilo Benicio nació en Río de Janeiro y de pequeño comenzó a actuar. Su primera mujer fue Alessandra Negrini —compañera en Mi Buen Querer— con quien compartió tres años y tuvo a su primer hijo, Antonio. A ella la dejó e, incluso, le hizo un escándalo mediático porque después de la separación, salió en Playboy.

Murilo después se enamoró de otra compañera, la actriz Carolina Ferraz, a quien abandonó por Giovanna.

Parecía que, finalmente, le había llegado el amor para toda la vida. Giovanna, por su parte, dejó a su marido, el publicista Ricardo Medina. Y hasta hace unas semanas, todo era color de rosa entre el actor y Antonelli. El primer hijo de la pareja, Pietro, parecía ser el primero de una potencial familia numerosa.

Según confirmó la agencia de prensa de los actores, ellos terminaron la relación que duró casi cinco años. Se habla de “celos, traición y desconfianza”, de que el galán que muchas veces fue comparado con Antonio Banderas no pudo contener su vicio de conquistar a sus novias de la ficción.

Se dice —para ser concretos— que Murilo dejó a Giovanna esforzándose por adelgazar los 20 kilos que engordó durante el embarazo y se fue con Gabriela Duarte, la coprotagonista de América.

Por parte de Giovanna fueron escasas las declaraciones.

Fuente: www.semanario.uolsinectis.com.ar

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