1
PRESAGIO
Me está empezando a golpear
una maternidad imaginaria.
Me está empezando a galopar
por las venas
el deseo de no ser
una sola-solitaria ciudadana.
Quiero saberme extendida
verme crecer
en otra sangre
y volverme carne ajena.
Me golpea la necesidad
de ser y dar.
Ese golpe es en realidad
una cosquillita graciosa en el estómago
una lluvia suavecita de palabras
como acurruco de tiernas ansias.
Deseo y necesidad
de hacer con mi vida
a
alguien.
Managua. Mayo 06, 2005
2
EMBARAZO
Cuatro meses
y contando
sin mucho que decirle
a los ruiseñores.
3
NIÑA O VARÓN
Sea lo que sea,
va a tener algo de poesía experimental:
Nada de saltos gramaticales que dificulten la comprensión
sino más bien cierta exasperación en el rosario de imágenes,
una tras otra, ensartadas a veces sin aparente conexión.
Tendrá además un tanto de Siglo de Oro y bastante de renacimiento.
Sin duda, nada de Medieval, mucho menos de Bizantino,
casi todo del clásico periodo de la Grecia Clásica.
De los romanos sus armas para luchar.
De los espartanos la disciplina para ganar.
De las antiguas civilizaciones
conocidas, perdidas, insospechadas
extraerá el hálito inicial para la fuerza de los comienzos
una que otra primitiva técnica de Lascaux
Y de los dinosaurios el vigor
(tan extinto en nuestros tiempos)
la fuerza, esa demente viveza
con que jugará
tras la baranda
en su camita de bebé.
4
Le voy a enseñar
a ser cruel con dulzura
a que esté en completo desacuerdo
con el orden natural de las cosas
para que su rebeldía sea natural en ella.
Va a ser alegre, viva, vivaracha.
Le va a gustar observar a las abejas
y exprimir de sus antenitas
la miel con que hilvanará su nombre
todas las mañanas
como si en lugar de letras
estuviera hecho con hilos
para tejerse
artificiosamente la vida.
Mi niña va a ser tierna, una tierna viejita de ternura.
Hasta que el sol se canse de amanecer
o la aurora de duplicar sus rayos
ella sabrá ser siempre Emilia.
5
Si es varón será más complicado el encuentro.
¿Qué hacer toda yo
con un completo cuerpecito de hombre
sólo para mí?
Mío, todito mío.
Emilia y yo seríamos desde el principio
casi como una misma
casi
pero un hombrecito
con las colgantes bolsas
delicado escroto
suena como un amanecer
que ni las flores pueden descifrar
o como un lenguaje de avispas
en el reino de las abejas.
Tendría que aprender
a explicármelo a mí misma
o seguro que alguna hormona
despierta y parlanchina
me enseñaría a descubrir mucho del padre en él
para después del reconocimiento inicial
del susto por tener
él y yo
cuerpos distintos
continuar
amándonos
con instintiva sencillez.
6
EMILIA
I
Le daré un nombre de miel
para que no tenga
nada que envidiarle a las flores
y bastante que aprender
de las abejas.
II
Será líquido y fluido.
Mi niña tendrá
un nombre de agua
para flotar sobre él
todas las mañanas.
7
Hoy amaneció Rosada.
La vi colgarse de los árboles,
jugar con alguna hoja
y entretenerse con mi nombre
entre las ramas secas.
Dijo que todo este tiempo
ha pasado despierta mientras duermo,
dormida mientras despierto.
Fue caprichosa en su afán de Rojo.
Luego se tornó Celeste.
¡Quién comprende a Emilia y sus colores!
8
Miro, busco, encuentro
un pedacito de felicidad
regada, olvidada
por cualquier parte
puesta por accidente
recogida a cántaros por mis manos.
Felicidad chorreada indistintamente
por la vida
para que a pesar
de la velocidad
y del trajín del tiempo
podamos
mi hija y yo
a ella asirnos.
9
SEIS MESES
Tengo perfil de luna
con una suave línea divisoria
al centro del estómago
estrógeno insistente
Tengo el cuerpo cansado a veces
mas siempre complaciente
lúcido en su expansión constante
porque hace meses ya
que ando
el vientre iluminado.
10
PARTO
Desesperación
que me
espera.
SLU. Enero-Marzo, 2008