El trabajo que hacemos desde Movitep? Pues que nos hemos metido a trabajar con la gente joven, que le gusta el teatro y se rifan a andar presentando sus trabajos en plazas, parques, centros educativos, cárceles, canchas de barrio, zonas rurales. Grupos que se nutren de la problemática cotidiana, que indagan en su entorno, pero que se han preocupado por mantener una actitud crítica, cuestionadora, y a partir de ello crean.
Desde 1999 hasta el 2008 hemos realizado 10 festivales nacionales, con grupos procedentes de diversas regiones del país, procurando no quedarnos amarrados a la capital, eso ha tenido sus costos en términos de proyección del trabajo de los grupos, pues si resulta casi imposible lograr una cobertura periodística amplia trabajando en Managua, mucho menos fuera de la capital, mucho menos en zonas rurales, comunidades casi olvidadas, barrios marginales y mucho menos porque, además, se trata de obras de teatro popular que no cumplen con los protocolos y reglamentos que para la cabeza de muchos deben ser contempladas en una producción teatral.
A estas alturas del campeonato hay críticos y entendidos en asuntos teatrales, quienes sólo de escuchar la expresión teatro popular se les paran los pelos y voltean la cara para otro lado claro, después se dedican a escribir profundos tratados donde se lamentan de la crisis por la cual atraviesa el teatro nacional. Aun así ya hemos logrado realizar 10 festivales, y los grupos han realizado cientos de presentaciones, recorriendo desde Managua, pasando por León, Granada, Masaya, Rivas, Estelí, Pueblo Nuevo, Jinotega, Matagalpa, San Ramón, El Lagartillo, Ciudad Sandino, Bluefields hasta El Salvador, Cuba, Mónaco, Holanda y Alemania, entre otros.
Entendemos esto como un proceso en el cual tenemos el reto de elevar la calidad del producto artístico, el público que acude a las funciones lo merece, pero también lo merecen los cientos de jóvenes que nos han acompañado en el camino, que se han metido al teatro, porque como dice alguno de ellos: Lo siento en la sangre, cada vez que subo a un escenario, primeramente me siento bien conmigo mismo.