A simple vista para ellos la vida es un chiste, siempre sonrientes y haciendo uso del buen humor y creatividad que cada uno posee, esas fueron las características que enamoraron a Damaris Núñez y Octavio Cortés, quienes llevan 15 años de matrimonio.
La primera impresión que tuvo Damaris Núñez de su esposo fue una hermosa voz, lo cual después la decepcionó porque supo que sabía imitar o crear la voz que deseara, después la admiración que cada uno sentía por el trabajo del otro fue la clave para llevarlos a tomar la decisión de casarse.
“Muchas personas piensan que después de algunos años el encanto se va perdiendo, pero en nosotros ha sido lo contrario porque nos vamos conociendo más y vamos descubriendo que podemos ser mejores de lo que éramos al inicio, vamos enriqueciendo la relación con el paso del tiempo”, señaló Núñez entre sonrisas.
Aunque provienen de culturas diferentes, lo cual podría ser un obstáculo para algunos, señalan que cada uno ha sabido respetar e involucrarse en las costumbres del otro, lo cual ha enriquecido la relación. Octavio Cortés es chileno y Damaris es nicaragüense.
Señalaron que al inicio de la relación fue difícil porque cada uno quería imponer su punto de vista, incluso, hubo un momento en que la relación no avanzaba, por lo cual tuvieron que buscar ayuda.
“En una relación es difícil que uno cambie, uno se va adecuando al otro, todo con amor, entendimiento, paciencia y haciendo concesiones, de lo contrario puede llegar un momento en que la relación se estanca”, comentó Cortés.
Ambos señalaron que para mantener la relación hay que formar proyectos de vida.