La Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció que se cumple un año sin ningún caso de poliomielitis en Siria, después de que la enfermedad reapareciera en el país debido al deterioro de las condiciones sanitarias por el conflicto que vive el Estado árabe.
En un comunicado, la OMS señaló que este “hito significativo” ha sido posible gracias a un “esfuerzo tremendo”, después de que se confirmara el primer caso en octubre de 2013 y tras una serie de campañas de vacunación que comenzaron ese mismo mes.
Recordó que desde 1999 no se había detectado en el territorio sirio ningún paciente infectado de poliovirus pero que, debido al conflicto iniciado en marzo de 2011, el sistema de sanidad pública ha sido devastado con un descenso del nivel de inmunización del 99 % de la cobertura al 52 %.
El nuevo brote causó parálisis a 36 menores en Siria y, como consecuencia de la expansión del conflicto y el flujo de refugiados a estados vecinos, otros dos en Irak a finales de abril de 2014.
La OMS consideró que el hecho de que no se hayan confirmado más casos en Siria desde hace un año y ninguno en Irak desde hace nueve meses es un “logro extraordinario”, que se ha conseguido gracias al compromiso de los gobiernos de la región, los empleados sanitarios y los padres que han vacunado a sus hijos.
La organización internacional subrayó la importancia de las campañas de vacunación y la coordinación a nivel regional para evitar que el virus se expandiera fuera de Siria e Irak.
Pese a las dificultades, la OMS afirmó que “parece que el brote está bajo control”.
El 9 de diciembre de 2014, la OMS lanzó la mayor campaña de vacunación desarrollada en Oriente Medio con el objetivo de inmunizar a 23 millones de niños en Siria y en estados vecinos.
La poliomielitis se transmite por vía oral o intestinal a través de alimentos o agua contaminados y puede causar parálisis.