Carta a Maduro
Señor Nicolás Maduro, presidente de facto de Venezuela: Su actual gestión política concierta perfectamente con el procedimiento seguido para su ascenso al poder: ambas cosas tienen lugar al margen de lo que demandan los principios del derecho y la legitimidad de las instituciones republicanas. Usted, señor Maduro, capturó el gobierno del país al amparo de los que detentan el poder totalitario en Cuba y se mantiene en él merced a una política de represión criminal.
Su manifiesta incapacidad política, su incondicional sujeción a los intereses de Cuba y la visceral corrupción de los mandos revolucionarios bolivarianos han conducido a Venezuela a la ruina moral y económica. Mas, lejos de tomar conciencia de la ruindad de sus actos, su gobierno persiste en su política de violencia inhumana.
Las instituciones que deberían garantizar la libertad de los ciudadanos, la paz social y la justicia han sido prostituidas. La prensa maniatada. Decenas de estudiantes han sido asesinados por hordas organizadas y armadas por su gobierno.
Los representantes de la oposición democrática son encarcelados y sometidos a torturas. Uno de ellos, Leopoldo López, lleva un año en prisión. Y ahora le ha llegado el turno al alcalde de Caracas, Antonio Ledezma, que acaba de ser apresado sobre la base de disparatadas incriminaciones.
Es lamentable que todos estos desafueros tengan lugar a la vista y completo mutismo de los —por lo general— locuaces representantes de Argentina, Brasil, Bolivia o Ecuador. Mudos están también los dirigentes del Alba o Mercosur. Incluso el señor secretario general de la OEA y los cancilleres de los países miembros parecen ignorar lo estipulado en la Carta Democrática y en la Convención Interamericana de Derechos Humanos.
A pesar de todo, señor Maduro, le rogamos que dé fin a su política basada en la violencia y en la represión. ¡Ponga en libertad a los presos políticos!
Tal vez le ayude a recapacitar el recuerdo de la existencia de una Corte Penal Internacional que puede condenar sus actos como crímenes de lesa humanidad.
José Leopoldo Decamilli
El silencio cómplice
Lo he dicho en más de una oportunidad, el silencio de los gobernantes en Latinoamérica con respecto a lo que pasa en Venezuela no es admisible, es indignante y los convierte en cómplices de todo lo que sucede allí.
El arresto el pasado 19 de febrero del corriente, del alcalde de Caracas, Antonio Ledezma, confirma una vez más que el régimen de Maduro actúa de forma dictatorial y viola las normas democráticas.
El analista político costarricense Claudio Alpizar Otoya, recientemente escribió en su muro de Facebook el 20-02-15: “La soledad de Venezuela: pobre Venezuela vive el destrozo de su democracia día a día en soledad, mientras tanto ningún gobierno de América Latina se pronuncia con contundencia sobre el pisoteo de libertades de movilización, prensa y derechos humanos. Algunos solo ven el pasado que promovió el presente de Venezuela, más no les importa que el presente socave aún más a esa nación. Así la diplomacia y la falta de carácter de los gobernantes de los ‘hermanos’ latinoamericanos se pasea sin voluntad de auxilio. ¿Mi país Costa Rica? Se le olvida que puede golpear la mesa por ser la democracia más antigua de la región y liderar un movimiento de auxilio”.
Sinceramente no se entiende el silencio de los gobernantes latinoamericanos, es algo incomprensible, la censura y las llamadas de atención hacia el gobierno de Maduro han salido de la Unión Europea, de las Naciones Unidas, y hasta del presidente Barack Obama quien el año pasado se pronunció a favor de que liberen a Leopoldo López, por esa razón me pregunto: ¿Por qué el silencio de todos aquellos que están gobernando en Latinoamérica? ¿Acaso todos estos gobernantes no son demócratas?
Las únicas voces que se han escuchado, e políticos de trayectoria pero que no gobiernan actualmente, han sido la de los expresidentes de Colombia, Álvaro Uribe y la de su colega costarricense, Oscar Arias Sánchez. Ellos sí se vienen pronunciando sobre los continuos atropellos que se cometen a diario en Venezuela. También vimos hace poco en Venezuela a los expresidentes de Colombia, Andrés Pastrana y al exmandatario chileno, Sebastián Piñera, comprobar en carne propia los atropellos que se dan en esa nación al no permitírseles ver a Leopoldo López.
Para qué entonces la OEA, Unasur o la Celac, si ningún gobernante (hasta el momento) se atreve a convocar a una de estas organizaciones de forma urgente para tratar el tema.
Carlos Vílchez Navamuel
Sobre el camarón cultivado
Leí con sorpresa que la India se convirtió en el primer exportador del mundo en camarón cultivado, desplazando a Tailandia. Ahora mismo este país productor busca camarón desesperadamente para sus plantas empacadoras hasta en el Ecuador, lo mismo le sucede a Vietnam, que junto con Tailandia acaban de sufrir grandes pérdidas por los síndromes de mortalidad temprana (EMS) y mancha blanca (WSSV).
México pasó de exportador a importador desde que perdió la cosecha en sus 32,000 hectáreas de la zona norte del país en el 2012, causadas por WSSV y EMS, esta última aún no ha sido confirmada ya que se han enviado muestras a la universidad de Arizona.
En el mundo los ecologistas y conservacionistas ahora ven a la acuacultura como la tabla de salvación de los recursos pesqueros del mundo que están crónicamente amenazados por la sobrepesca mundial, Inclusive empresas filantrópicas han donado 53 millones de dólares, según fuente de noticias financieras Bloomberg, estos fondos filantrópicos están disponibles para aquellos que tengan una solución sostenible para salvar el planeta del desastre.
Ojo con el uso de los antibióticos. Recientemente en Estados Unidos estuvieron detenidos en puerto 150 contenedores provenientes de China, con camarón, mientras estos eran analizados por sustancias prohibidas como antibióticos causándole a los exportadores grandes, millonarias pérdidas económicas, porque tuvieron que renegociar el precio y pagar peaje de los contenedores ya que las autoridades se tomaron más tiempo del normal en analizarlos. Recuerden que un solo contenedor de camarón con antibióticos y salmonela puede causar el cierre de las exportaciones de Nicaragua si se le detecta un solo problema antes descrito.
Nicaragua sigue creciendo en el área de cultivo de camarón pero no en plantas empacadoras, ya es hora de la quinta planta o la alternativa de abrir la frontera hacia el país vecino de Honduras donde todo es más barato: hielo, empaque, maquila y mejores precios. (Fuente de información suministrado por la ANDAH).
La mala nota es que las grandes empresas no han invertido en un laboratorio de patología, microbiología y calidad de aguas, este servicio debería de ser para todos los productores sin distinción de quién y el tamaño de la granja “no sería de gratis” pero sí la información que pueden obtener al vender este servicio les permitiría saber dónde existen problemas y ayudar a solucionarlos. Recuerden señores que una pequeña manzana podrida puede echar a perder un canasto lleno de grandes y jugosas manzanas.
La buena nota se la llevan las instituciones que siguen el lema del gobierno “Solidario”, están ayudando a los pequeños y algunos medianos productores de camarón en la zona del Estero Real con financiamiento en especies, proveer maquinaria para reparar sus fincas, larva y alimento de calidad para camarón, fondos para mantener a sus familias mientras se cosecha, y mejores condiciones humanas de trabajo, y aún más les prestan la ayuda técnica durante todo el ciclo asegurándose una terminación exitosa del ciclo.
El beneficio será el bienestar social y económico de las familias, las instituciones y el municipio.
Enrique Manuel Niño Cordero