Sanciones draconianas
Nasere Habed López. Psicólogo, Doctor Honoris Causa de la UNAN-Managua y Orden Mariano Fiallos Gil, del Consejo Nacional de Universidades.
Encuentro draconianas las sanciones que se tratan de aplicar a la directora Nelly Márquez de Alonso, directora del jardín infantil de Altamira. Su pecado fue imponer la disciplina como en el pasado se nos imponía a nosotros, mediante coscorrones, pellizcos, jalada de patillas, reglazos, regaños, llamados fuertes de atención.
Es censurable la conducta de la profesora Márquez, de eso no cabe duda, pero el castigo del cierre del kínder y posibles sanciones penales sobre su persona, es excesivo en relación con la falta. Me preocupa la proyección que pueda tener en el magisterio nacional, la virtual pena de muerte que se está imponiendo a la profesora Márquez, que no es otra cosa que dejarla sin su medio de vida y realización profesional, después de dedicarse durante 45 años a la educación infantil.
Se está creando en el profesorado nicaragüense terror de incurrir en sanciones legales por violencia física o psicológica, si emplea cualquier medida disciplinaria para corregir la conducta de los estudiantes.
Se necesita un inmenso esfuerzo de las autoridades educativas para concienciar a los maestros de los diversos niveles de la enseñanza, respecto a lo que deben hacer para orientar a sus alumnos hacia el recto cumplimiento de sus deberes y hacia formas deseables de convivencia. Hoy más que nunca debemos tener presente que el clima escolar se ha deteriorado. Se han incrementado los problemas de convivencia entre los alumnos y están faltando las relaciones de respeto que deben existir hacia el profesor.
En todo caso, debemos considerar que el “dejar hacer, dejar pasar”, el permitir que los niños además de hacer lo que les da la gana en el hogar, hagan lo que les da la gana en la escuela, solo consecuencias negativas dejan en el desarrollo de la personalidad de los niños y de la sociedad.
La misión de la escuela es la formación integral de la personalidad del educando. Ello solo es posible si existe un marco mínimo de comportamiento que favorezca la formación de hábitos y cualidades morales valiosas para el individuo y para la sociedad. “Marcar reglas, tener la última palabra, exigir el orden, no tiene por qué ser relacionado con la letra con la sangre entra”. (Ma. Rosa Sastre y Ángeles Doñate).
Emprendimientos
Salomón Samuel Mendoza Suárez, municipalista.
Generar un negocio no es ni será tarea fácil para quienes abandonaron su zona de confort. Algunos han sido criticados como ilusos, tontos y por qué no decirlo, tildados de maniáticos. La manera de aventurarse a construir su propia empresa y ser su patrón, es un camino por el cual pocos se atreven a transitar.
La filosofía cortoplacista del nicaragüense no le permite tener una visión hacia el éxito, sin embargo, se debe instruir en el emprendedor un modo de vida, tal como una vez lo hizo años atrás el noble y bien ponderado pueblo japonés, famoso por su frase hito-kane-mono (gente, dinero y cosas). Tener un negocio se asemeja a la crianza de un niño, al que se tiene que alimentar, llevarlo al médico, bañarlo, amarlo, etc. Si un nicaragüense, emprende un negocio y este no le proporciona un carro Mercedes-Benz en los primeros cinco años, inmediatamente deduce cerrar y optar por buscar un empleo “fijo”.
El japonés hace un plan para que el niño (negocio) vaya creciendo paso a paso y cuando se convierta en adulto, más allá de los veinte años, es cuando está preparado para sostenerse por sí solo.
Las universidades del país son responsables directas en hacer conciencia a los jóvenes estudiantes y hacer de su carrera el vehículo para abrir brecha en la ola de la globalización tecnológica de rápido crecimiento, asimismo este (título universitario) debe servirle para construir imperios económicos en armonía con el entorno social y ambiental.
Es cierto lo que dicen algunos funcionarios de las alcaldías, Gobierno central, entes autónomos y otros poderes del Estado, que “la calle está dura”, por eso para ellos es riesgoso emprender algo y no desean soltar el hueso debido al miedo a que la “calle” se los coma vivos, ya que no saben otra cosa que lamer botas.
Muriendo de sed, teniendo tanta agua
Byron S. López López
Nicaragua es un país privilegiado con una de las mayores riquezas acuífera del istmo, con tres lagos, más de veinte lagunas, más de ochenta ríos, una precipitación anual de más de 2,300 mililitros, una producción anual de lluvia de más 185 kilómetros cúbicos, que si dividiéramos esta cantidad de agua superficial caída entre todos los habitantes del país, equivaldría que cada nicaragüense tiene para consumir más de cien mil litros de agua por cada día. Esta cantidad de agua es 23 veces mayor que el umbral de 1,700 metros cúbicos que debe disponer un ser humano para vivir, según las Naciones Unidas (ONU).
A pesar de toda esa cantidad de agua, Nicaragua enfrenta una grave problemática de falta de agua en cantidad y calidad por diversas razones, tales como distribución insuficiente, falta de conciencia en el pago, mala administración del recurso, mal uso y aprovechamiento del vital líquido.
En los informes de los foros y cumbres internacionales sobre el agua, dan la cifra de que más de dos billones de personas en el mundo están sin acceso al agua potable, por desabastecimiento, mala distribución, mal uso y manejo del agua, mientras transnacionales registran ganancias millonarias en dólares por venta de agua embotelladas y sus derivados.
Las futuras generaciones serán las que resistirán la escasez, falta de acceso al agua, por inconsciencia, uso inadecuado, desperdicio, deterioro y mala administración de los sistemas e infraestructura existentes de servicio de agua, deforestación, destrucción de los bosques, erosión de los suelos, escorrentías hacia las aguas superficiales, contaminación de las cuencas hídricas, uso desorganizado de los suelos para la agricultura, una elevadísima tasa de crecimiento poblacional y falta de políticas de desarrollo social, económico y ambiental del vital líquido.
Es urgente y necesario un plan de gestión, desarrollo y estrategia Integral de los recursos hídricos nacional y regional, con políticas definidas de uso, aprovechamiento, manejo de la rica precipitación, cuencas hídricas y mantos acuíferos donde se prioricen, según la Ley 620 “Ley General de Agua Nacionales”, el consumo humano doméstico, uso agropecuario, energía eléctrica, para mantener el equilibrio hídrico, ecológico y la biodiversidad de las cuencas, subcuencas, microcuencas, ríos, lagos y lagunas, esteros, manglares, etc. Y fomentar una visión integradora del agua, como derecho a la vida y un potente motor del desarrollo económico, social y sobrevivencia humana.
El exorcista
Josefa Romo. España
Se habla de demonios y de exorcistas y no solo en la literatura y el cine. La existencia del diablo es dogma de fe y la posesión diabólica es real, aunque no frecuente. El exorcista es el sacerdote que por designación del obispo diocesano realiza el ministerio de liberación del espíritu del mal. Se dan casos muy difíciles, pero suele haber éxito, si bien, también se dan reincidencias por abandono de la oración o por la falta de amor al prójimo. Dice el exorcista italiano Sen Babolín que urge el nombramiento de exorcistas, que “hay una emergencia pastoral”. San Juan Pablo II hizo tres exorcismos y al papa Francisco se le vio imponer las manos sobre un poseso, en la plaza de San Pedro y hacer una plegaria (se pudo ver en TV). Sen Babolín dice: “No he dudado nunca de la existencia del diablo y de su influencia en el hombre, pero desde que soy exorcista he entendido lo que significa verdaderamente”.
El Maligno es capaz de destruir culturas, de destruir pueblos. Tiene envidia del hombre (…). Al Maligno le molesta el amor humano. En un exorcismo, el diablo me dijo con rabia: “¡No soporto que se amen!” En España, el exorcista más conocido es el padre Fortea.
Los exorcistas desaconsejan a los cristianos ciertas prácticas de esoterismo por las que puede entrar el diablo: el espiritismo y la güija, el reiki y el yoga… El sacerdote indio padre Manjackal afirma: “El cristianismo y el yoga son dos puntos de vista que se excluyen”. (www.jmanjackal.net/esp/esp.htm.)
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